La amiga del pueblo
Fecha: 16/02/2025,
Categorías:
Hetero
Autor: Isaza Morales, Fuente: CuentoRelatos
... recorriendo las distintas pozas, en las cuales parábamos a nadar un rato y a observar como chocaban las olas contra las piedras, y posteriormente seguíamos a Fernando, que era el que conocía más o menos la zona. Llegamos a una poza en la cual vi un saliente por encima del agua, y les dije a mis amigos que se bañaran ellos, que yo me iba a sentar un rato con la excusa de que antes me había hecho daño en el tobillo al pisar una piedra y a ver si se me pasaba. Mi objetivo de sentarme allí realmente era observar un rato a Lucía, ya que desde lo alto iba a tener mejores vistas jeje.
Me senté allí y cada poco le echaba alguna mirada, llegando en algún momento a cruzar nuestras miradas, momentos en los cuáles yo rápidamente aparte la vista avergonzado, y a ella se le escapo alguna risita.
Pasada la tarde, nos decidimos a volver cada uno a su casa, y quedamos a la mañana siguiente para ir la playa. Esa noche estuve pensando en Lucía, en lo buena que estaba y que al día siguiente debía hacer algo, ya que por la mañana del día siguiente de mañana ya tenía que marcharme y debía atar lo de Lucía de alguna manera.
A la mañana siguiente, fuimos a la playa y armamos nuestro campamento. En un momento dado, Emilio y Fernando estaban bañándose y Lucía y yo estábamos sentados en la toalla charlando, cuando se decidió a "regañarme" por lo del día anterior.
Lucia: Anda Marcos, que vaya miraditas te vi echarme ayer, de roja y expulsión
Antes esto, yo me sonrojé de vergüenza, ya ...
... que no me esperaba que fuera tan directa
Marcos: Ehhh, bueno… es que las vistas lo merecían
Lucia: jajaja, que tonto eres
Tras esto, ella posó su mano en mi rodilla, y comenzó a subir hacia mi entrepierna, comenzando a despertar a "mi amigo".
Lucia: Apuesto a que a tu amiguito también le gustaron las vistas
En esto, llegaron Fernando y Emilio, y Lucía quito la mano de mi pierna y se separó rápidamente, pero el objetivo era claro: me tenía que follar a Lucía como sea.
Decidimos ir a comer los 4 juntos, y posteriormente a pasar la tarde por el centro del pueblo de bar en bar. Cuando tuve ocasión, le comente a Fernando mi situación, y si me podía ayudar a "forzar un encuentro a solas con Lucía".
-No te preocupes hermano, que yo te ayudo -dijo Fernando ante mi petición.
Estuvimos tomando cervezas hasta que anocheció, y ahí fue donde comenzó el plan de Fernando:
Fernando: Oye chicos, se ha quedado muy buena noche, ¿que os parece si nos damos un baño nocturno como broche final al fin de semana?
Emilio: Ostia, dale, va
Lucía: vale, seguro que está gracioso jaja
La casa de Fernando tenía una piscina disponible para las vecinos la cuál a lo largo del día estaba plagada de niños y padres, pero si íbamos por la noche, no nos íbamos a encontrar a nadie allí (solo nosotros 4), y además estaba algo alejada de las casas.
Lucía fue a su casa a cambiarse, y nosotros fuimos a la de Fernando a cambiarnos, y a trazar el plan: íbamos a la piscina, y cuándo yo ...