Desinhibición
Fecha: 14/03/2025,
Categorías:
Infidelidad
Autor: Mar1803, Fuente: CuentoRelatos
... cuando alguna mencionaba que fulano o zutano estaba muy “ensabanable” le hicieron pensar en que quizá debería de comportarse con mayor seguridad y displicencia ante aquellos a quienes miraba con cierta excitación.
Esa certeza, la hizo arreglarse con mayor coquetería y vestimenta más atrevida. Su marido lo notó, pero le pareció bien que sus amigos lo envidiaran por tener una mujer tan hermosa, incluso que ellos la miraran lujuriosamente. Pero esto último ocurría porque ella les coqueteaba cuando su esposo estaba distraído o no se encontraba presente. Varias veces, cuando estaba sentada frente a ellos, abrió las piernas para ver qué tanto les crecía el bulto entre las piernas. Todo ello lo contaba con jocosidad a sus amigas, quienes le aconsejaban otras formas de juego para ponerlos más calientes.
Ella se convenció que estaba bien comportarse como puta y llegó a tirarse a tres hombres, pero sólo con uno de ellos se sintió plena y lo retuvo como amante. Su vida cambió, para bien, a partir de ese momento y durante tres años más. Su marido no se enteró jamás del comportamiento infiel de su mujer, pero sí se enteró, cuando Arcelia se lo informó, que ella decidió estudiar su bachillerato para seguir una carrera universitaria, lo cual mostraba independencia en sus asuntos personales, entre otros cambios de personalidad.
Teresa. Se casó poco antes de cumplir los 22 años. Era feliz con su novio, con quien tuvo un noviazgo que duró más de cuatro años. No obstante, un par de ...
... hombres le habían “movido el piso y las hormonas”, pero ella resistió y le entregó la virginidad a su novio.
Ya casada, no tuvo mucha resistencia para aceptar de amantes a dos de aquellos hombres a quienes había dejado con la verga lista para el coito. Su parteaguas fue cuando resultó embarazada del primero de los amantes, lo cual le ocultó al padre biológico y el crío nació dentro de la familia. Empezó a leer cuestiones sobre el feminismo y creyó firmemente que las mujeres deberían poder hacer lo mismo que los hombres, lo cual le justificaba plenamente tener amantes y tirarse a todos los hombres que se le antojaran, e hizo sin recato alguno, a pesar de las reticencias de su esposo. La unión matrimonial terminó en divorcio y con una pensión que le garantizó continuar su vida libertina. No aceptó nuevas propuestas de matrimonio y les dejó claro a los pretendientes que ella los quería para el sexo y, si no les parecía, podrían retirarse.
Su vida transcurrió entre personas de la onda new age y trabajos para impulsar el feminismo, el cual poco a poco aprendió que tenía muchas aristas. Después de tener cientos de relaciones, unas duraderas y otras fugaces, se calmó y quiso recuperar la calma perdida. Así, la “viuda del feminismo”, como solía llamarse a sí misma, volvió a casarse para estar en paz, pero aceptó, esporádicamente y sin que su nuevo marido se enterara, algunos “acostones” para suavizar la calentura.
Mar (yo). Ya lo relaté al principio. Lo interesante del asunto, ...