1. La espada legendaria


    Fecha: 19/03/2025, Categorías: Infidelidad Autor: beck the ripper, Fuente: CuentoRelatos

    ... coja así, nena? ¿Quieres más?
    
    —¡Ah! Sí, mi amor. ¡Cógeme! ¡Cógeme! ¡Ay, así! ¡Ah!
    
    Entonces Jessica, tras un sonoro orgasmo, se corrió... se vino... se mojó encima de su amante.
    
    Él la besó, luego salió de ella. La volvió a besar. Se giró con ella, quedando ahora él encima. Jessica le sonrió y le dijo en un susurro "Más, mi amor". Y se dejó penetrar.
    
    ***
    
    Manuel estaba por pasar uno de los niveles más difíciles del juego. Pero cada vez que lo intentaba, perdía.
    
    —¿Otra vez? ¡Maldita sea! —Entonces escuchó a lo lejos unos ruidos, que venían de la planta alta. Pero en ese momento reapareció en el juego, subió el volumen a la pantalla y olvidó los ruidos. —A ver, otra vez. Desenvaina tu espada, Manu.
    
    Pero sólo iba armado con un pequeño cuchillo.
    
    ***
    
    Eran las 20:32 h. Valente ahora tenía a Jessica en posición de perrito y se la estaba cogiendo muy duro.
    
    —¡Ah! ¿Te gusta mi verga? ¿Te gusta, nena?
    
    —¡Me encanta, mi amor!
    
    —¡Manuel! —Dijo Valente en voz alta—. ¡Ven a ver lo que le estoy haciendo tu esposa!
    
    —¿Qué haces?
    
    —No nos escucha, mi amor. Tiene el juego a todo volumen.
    
    —¡Ah! No estés jugando... ¡Ah! Te vaya a oír.
    
    —¿Sí? ¿Qué harías si sube en este momento y entra a la recámara? No pusimos el seguro, nena.
    
    —¡Ay! Que venga si quiere... A ver si así aprende un poco... ¡Ah!
    
    Y la penetró un buen rato más. Mientras las nalgas de Jessica rebotaban con las piernas de Valente una y otra vez.
    
    —¡Ah! Estás bien pinche nalgona, Jessie. El ...
    ... idiotita ese de Manuel seguro que no sabe ni qué hacer contigo, nena.
    
    —No, mi amor. Él no aguanta nada... Cinco minutos y se viene el pobrecito.
    
    —¿En serio? Pobre tonto.
    
    —Sí, mi amor... ¡Ah!... Además, ya te he dicho que Manuel tiene un pene muy pequeñito y miserable.
    
    —¿Y yo, nena? ¿Eh?
    
    —Tú lo tienes enorme, mi amor. —Valente aumentó el ritmo más y más, sus manos se aferraban a las nalgas de su amante— Tú sí eres un hombre. ¡Aah! ¡Así, mi amor! ¡Cógeme!
    
    Después de unos minutos más, Valente se corrió finalmente. Eyaculó adentro de Jessica, pero llevaba el condón puesto, así que no se preocupó.
    
    Salió de ella, tiró el condón en el piso y abrazó a su amante. Luego se besaron.
    
    —Eres increíble, Jessie.
    
    —Tú lo eres más, mi amor.
    
    ***
    
    Cuando bajaron a la sala, Manuel estaba apagando la consola. Eran cerca de las 21:00 h.
    
    —¿Todo bien? ¿Pudieron terminar su trabajo, amor?
    
    —Sí, amorcito. Justo terminamos hace unos momentos.
    
    —¿Gusta quedarse a cenar, licenciado? —Lo invitó Manuel, amablemente. Se veía feliz. Parecía no sospechar nada. Sí que se había embobado con el juego ese.
    
    —Pues, la verdad... —empezó a decir Valente.
    
    —Quédate a cenar. — Le dijo Jessica y lo miró a los ojos —. Debes estar... hambriento.
    
    Cenaron juntos y después Valente se fue.
    
    Jessica se dio un baño antes de irse a la cama. Manuel la estaba esperando y quiso hacerle el amor. Pero ella se negó: "Estoy cansada, Manu. Mejor duérmete". Y mientras él comenzaba a roncar, ...