Vacaciones con Papá 2
Fecha: 30/03/2025,
Categorías:
Incesto
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
Como les conté en mi anterior relato, después de mi primera noche con papá, me desperté con su boca en mi coño, era maravilloso, no había terminado de abrir los ojos y ya estaba a punto de correrme otra vez
Sin más preocupaciones, me metí su verga en la boca y comencé a chupársela, mi padre gemía y me agarraba la cabeza para que no parara de chupársela, yo cada vez estaba más mojada y con más ganas de volver a meterme su polla en mi coño.
En ese momento, mi padre me hizo ponerme de pie, se sentó en el borde de la cama y me puso de espaldas a él, me dijo que mirara dirección la televisión, yo no entendía nada, pero le hice caso, empezó a acariciarme por todo el cuerpo, deteniéndose donde más le gustaba, mis tetas, me las pellizco hasta que mis pezones quedaron bien duros y después me cogió una para que me la metiera en la boca, mientras me mamaba una teta, él me tocaba lo otra, siempre mirando la tele
Ya no aguantaba más me sentó encima de él, dándole la espalda y bien abierta de piernas, como si alguien me quisiera ver el coño desde la tele. En ese momento, levantó en el aire y poco a poco me fue bajando mientras me iba metiendo su tremenda erección.
En ese momento llamaron a la puerta y mi padre me tapó la boca, queriendo simular que no había nadie. A los pocos minutos y tras volver a llamar, la puerta se abrió, era la chica de la limpieza, que venía a hacernos la habitación. Mientras tanto mi padre seguía moviéndose dentro de mí y yo no sabía qué hacer si gemir ...
... de placer o gritar de vergüenza.
Y ahí estaba yo, abierta de piernas, mientras mi padre me follaba bien duro y una completa desconocida, me comía las tetas. Era una sensación muy rara, pero a la vez muy placentera, tanto que no tardé mucho en correrme y a los pocos minutos, mi padre no aguantó más, llenándome el coño de su leche, mientras le decía a Laura, nuestra nueva amiga, que le daba 50€ más si me limpiaba el coño con la lengua, lo cual ella no dudo. Fue fantástico, tener a dos personas dándome tanto placer al mismo tiempo.
Laura, era una mujer de unos 50 años, no era muy guapa, pero tenía algo especial, a parte de una excelente habilidad con la lengua. Nos contó que tenía varias personas a su cargo y que le era muy difícil pagar tanto gasto con su sueldo, por eso se ofreció a jugar con nosotros el resto de la semana a cambio de más dinero.
Mientras Laura nos hacía la habitación, papá y yo nos fuimos a la ducha. Cuando salí, ella se acercó a despedirse con un húmedo beso en los labios, mientras me pellizcaba mis sensibles pezones, poniéndolos duros otra vez.
Una vez listos, nos fuimos a desayunar a una terraza de frente al mar. Yo no paraba de pensar, en porqué mi padre me decía lo de follar de frente a la tele, sabía que había algo más, pero no me atrevía a preguntar.
Tras desayunar, nos fuimos a pasar el día por la ciudad. Aprovechamos para comprar regalos para todos y recordé que no había vuelto a hablar con mi mamá, desde que llamó para decir que había ...