La criada. Una escena de azotes y voyeur
Fecha: 15/04/2025,
Categorías:
Fantasías Eróticas
Autor: elzorro, Fuente: CuentoRelatos
... atrevió a asomarse y contempló como Mary descubría el culo.
Se llevó la mano al sexo.
- ¿Preparada? - intervino Steven colocando la vara en medio del trasero de la joven.
- Sí señor. - respondió la joven mientras tomaba aire y tensaba su retaguardia.
La doncella que miraba fue testigo del primer golpe. Contundente, limpio, impecable. Un azote que dejó una línea colorada y a buen seguro, un ramalazo de dolor.
A medida que los azotes caían la excitación de la "voyeur" aumentaba hasta el punto de llevarse una mano a la boca por miedo a gritar. Aun sin ser la receptora del azote, apretaba el esfínter cada vez que la vara mordía las nalgas de Mary, para luego, con placer culpable, tocarse sus partes íntimas.
Nadie era inmune a la atmósfera y a las sensaciones de una buena tunda en el trasero. Hasta la propia azotada, que se esforzaba por mantener la compostura y estarse quieta, vivía en un mar de sensaciones. Calor, vergüenza, escozor y, por raro que parezca, placer, placer que se concentraba en ...
... su entrepierna hasta formar un fino hilo, apenas visible, de líquido vaginal.
Después de unos minutos, que parecieron eternos. El azote número doce puso fin al castigo corporal.
Mary se incorporó y con permiso del señor Steven frotó con delicadeza sus posaderas.
El señor Steven, discretamente, se sentó tras el sillón, tratando de ocultar su erección. Las formas importaban y no era decente, por muy natural que fuese, mostrar temas de índole sexual en presencia del servicio doméstico.
En el pasillo, la chica del té se retiró a su habitación, cerró la puerta, se desnudó y con las imágenes de lo que acababa de contemplar y la inestimable ayuda de una almohada contra la que frotar las partes privadas de su cuerpo, se entregó al placer de la autoestimulación.
Fuera comenzó a llover.
Horas más tarde, la señora de la casa se reunió con su marido. No fueron necesarios los preliminares. El pene de su hombre se levantó y se puso duro en segundos, listo para hacerle el amor como a ella le gustaba.
Fin