Mi prima latosa - P2 [Relato ficticio] - Relatos Eróticos

Mi prima latosa - P2 [Relato ficticio]

... abuelos y mi otra prima. Quizás mi vida cambiaría de una forma que nadie quiere vivir. En fin la fila de la farmacia avanzo y llegue al mostrador por segunda vez ese día, mis padres preocupados me estaban llamando porque me había tardado tanto. Tuve que mentir obviamente y decirles que me había quedado horas extra y que ya iba de regreso que estuvieran tranquilos. En el mostrador pedí la pastilla y había varios modelos, al parecer uno más fuerte que el anterior.

Había una pastilla para las 24 horas, otra efectiva para las 48 horas y otra efectiva para las 72 horas. La de 72 horas era la más costosa, les explico los tiempos son después de haber tenido la relación sexual sin protección, es decir una es para 24 horas después y la otra para luego de 48 horas haber tenido la relación y de igual forma la de 72. Entonces compre la de 72 horas, si las cosas salían mal. Eso me compraba más tiempo y era lo que necesitaba. Casi enseguida de pagar la pastilla me fui a la parada del autobús a tomar ahora dos de regreso, el primero me dejaba cerca del trabajo y el segundo cerca de mi casa y estaba bastante lejos. Una hora más tarde por fin llegué.

Tenía la pastilla conmigo, solo quedaba una cosa por resolver y era como debía dársela. Pensé en varias formas de hacerlo para ser sincero, pero solamente una funcionaria y es que se que al combinar estos químicos los cuales ya vienen con hormonas y otras sustancias más que alteran el cuerpo y metabolismo de la mujer. Asi que debía pensar ...

... en cómo dársela con agua, llegando a casa tuve que hablar con mis padres, ellos ya estaban a punto de ir a dormir a su habitación (ya era tarde?. Les explique otra vez mi motivo, el cual les respondí en la llamada y para ellos me había quedado a trabajar, en la sala también estaba mi prima pequeña, bueno ya no tanto (ya ella tenia 15).

Mis padres de mala manera asimilaron mi mentira y prácticamente a regaña dientes se despidieron y nos dieron las buenas noches, pero no sin antes decirme que la cena estaba lista en el microondas y que mi prima Estefania aun se sentía un poco mal, que no hiciera ruido. Entonces aunque había llegado tarde, quizás aún tenía oportunidad de arreglar mis cosas. Me fui a cenar y mis padres a su habitación a descansar. Terminó de cenar y vuelven a mi los pensamientos. Mi prima no salía de su habitación, ni a buscar un vaso de agua. Así que tenía que ir allí, afortunadamente para mí su habitación quedaba detrás de la cocina, debido a que ella quería la habitación más grande desde que nos mudamos a esa casa. En fin, solamente tenía una opción y esta era la más difícil de todas. Me arme de valor como pude y fui hasta su habitación, primero toque y no respondió, así que toque dos veces más, Estefania! Y la llamé hasta que a la tercera respondió, pasa me dice, me he sentido un poco mal y no quiero levantarme.

Entro y le digo algo que ya es cliché en muchos aspectos. Pero le digo prima tengo que hablar contigo me puedo sentar?. Me respondió que si. Me ...