Puta Putona RePuta
Fecha: 04/11/2018,
Categorías:
Anal
Famosas,
Masturbación
Autor: ZeuzMEXICO, Fuente: xHamster
... pregunté a mi compañero, el pastor: a él le habían dicho que Fermina, la hermana menor, se estaba peleando.Fermina no entró a la casa y la única explicación que dieron fue que era “muy peleadora”; que habían pasado unas chicas por la vereda de enfrente y le habían gritado algo que nadie sabía, muy probablemente “puta”. En encuentros posteriores ella no se incorporaba al grupo pero entraba y salía de la casa una y otra vez; era su forma de hacerse ver. Era soberbiamente altiva y despreciativa, desde su reciente belleza adolescente.En esa casa, la mayor parte de las aberturas no tenían marco, ni qué decir puertas: algunas tenían cortina, otras ni eso. La única puerta era la del baño y la de calle; el resto, agujeros. Paredes descascaradas. Pegadas en las paredes, láminas de River, algún santo, algunas vírgenes. Y, también, una sola foto: la de ella. Una bella foto, aunque desteñida. En una de las reuniones, la madre, quejándose amargamente, dijo, sin que esto sorprendiera a sus otros hijos, que Fermina había sido la única de los cuatro que ella había querido tener. También decía que a los seis años, o sea, un año antes de empezar a cartonear, como Fermina le reclamaba que quería conocer al padre, ella le había dicho quién era.El padre vivía a una cuadra de la casa. Fermina se había presentado ante él para buscar, sin apelar a legalidades, que la reconociera como hija. El le había contestado que no tenía interés en ser padre de ella y que, además, tampoco estaba seguro de si lo ...
... era o no. La madre tenía registrado que el rechazo del padre le había producido a la piba una herida terrible. Y que desde entonces se había hecho tan cocorita y peleadora. En las reuniones de familia, mucho giraba alrededor de acusarla. Lo hacían todos, la madre, los hermanos, las hermanas, los cuñados: que no era colaboradora, que no cocinaba nunca, que no lavaba, que era egoísta, que les robaba algún peso para tarjetas de celular, que se había ido de la primaria sin terminarla.Los hermanos decían que era la protegida de la madre. La madre decía que el problema era que la chica andaba en malas compañías. Otra acusación era que se quedaba a dormir en la casa del novio: no era una crítica moral, sino que les m*****aba que se quedara ahí para eludir las tareas de la casa. Los códigos de la villa no son los mismos que los de otros sectores sociales. El novio de Fermina era estudiante en la Universidad Tecnológica Nacional; venía de una familia de clase media baja, marginal a la villa.Un día me pidió venir al confesionario. El “confesionario” era el auto del pastor, donde yo los atendía de a uno. Vino después de un día que la habían “gastado mucho”, según ella, y tanto el pastor como yo intervinimos para parar la cuestión. Fermina participó de esa reunión que era muy grande, ya que estaba muy acongojada porque el novio la había dejado, ergo, había llegado la hora de la venganza para los hermanos y hermanas que ahora podían burlarse y hostigarla. La categoría de “malos y buenos” ...