Afortunadamente todo se conjugó muy bien
Fecha: 03/06/2025,
Categorías:
Infidelidad
Autor: Mar1803, Fuente: CuentoRelatos
Aún no salgo de mi asombro. No me cabe la menor duda que soy muy afortunada pues algo que, por el azar, pudo salir mal, fue una experiencia hermosísima.
El lunes, como otros lunes, apenas se fue mi esposo a trabajar, salí de mi casa bien cogida por mi marido y sin bañarme para ver a mi amante quien le gusta lamer mi cuerpo muy sudado y con salpicaduras de semen, donde haya ocurrido debido al calor de dos días que estuvimos encamados mi cónyuge y yo.
Cuando llegué a su departamento, él ya estaba encuerado y con el pito bien parado.
–¡Qué urgencia tienes amor! –le dije dándole jalones al tronco y salió presemen, del cual ya tenía el glande cubierto.
Él me besó y me cargó para llevarme directamente a la cama, donde me depositó comenzando a encuerarme.
–¡Qué bueno que llegaste temprano! Estoy muy caliente y me la estaba jalando un poco mientras te esperaba –me dijo sin dejar de desvestirme, besando o lamiendo cada parte que quedaba al descubierto.
Yo me empecé a poner muy arrecha y cuando me quitó los calzones y lamió mi clítoris ya no lo dejé escapar. Lo tomé de la cabeza y me tallé la panocha con su cara. Él metió la lengua y empecé a soltar chorros de jugos. Yo sólo escuchaba cómo deglutía la mezcla de las venidas que me provocaba y el semen que me dejó mi marido. ¡De verdad que ambos gozábamos con el amor que mi esposo me dio!
–Dime ¿en qué pensabas cuando te la jalabas, nene? –le pregunté liberándolo un poco de la presión con la que recargaba mi pubis ...
... en su rostro.
–En saborear esta pepa y este culo con mi lengua –contestó antes de recorrer el periné con su lengua y llegar al ano donde metió la punta y las dejó libre del semen de mi cornudo que escurrió por las nalgas cuando él me enculó.
–¿No tuviste acción el fin de semana? –le pregunté creyendo que eso era lo que lo tenía caliente.
–Sí, buena parte de la mañana del sábado me fui a la casa de mi ex, donde llegué unos minutos después de que su amante salió después de haber pernoctado con ella.
–Lo dices como si hubieses estado esperando a que ella quedara sola.
–No esperé mucho, pero sí fue así. Ella me invitó a recibirme en cuanto se desocupara. “Ya salió” decía su mensaje, cuando lo vi subirse a su auto, contesté “Ya estoy abajo”. Apenas el amante pasó por donde yo me estacioné, bajé de mi carro y fui a tocar su puerta. Me abrió sólo cubierta por una delgada bata y me metí a su casa. Le di un beso quitándole la prenda para mamarle las chichotas, aún húmedas con los besos de despedida. La llevé cargada a su cama, con las cobijas revueltas y tibias que olían a sexo. Los vellos que ambos dejaron en el fragor del amor resaltaban en la blancura de las sábanas. Le chupé la panocha como te lo hago a ti y bebí el amor consumado… –me contó entre lamida y lamida.
–¿Te la chupó tu ex? –le pregunté antes de tomar su falo para metérmelo a la boca. Con unos cuantos jalones soltó dos grandes chorros que tragué.
–Sí me la mamó tan rico como tú lo haces –gritó en su ...