1. Mi compañera de universidad solo necesitaba buen sexo


    Fecha: 09/06/2025, Categorías: Dominación / BDSM Autor: YF Santos, Fuente: CuentoRelatos

    ... trasero perfecto, no me juzguen. Procedió a devolverme el favor chupando mi verga hasta dejarla empapada en su saliva, debido a qué, no me esperaba llegar a eso, no contaba con condones, pero no le importó, puesto que me montó y me introdujo así, sin siquiera preguntar si tenía o no, comenzó a darme fuertes sentones mientras yo luchaba por no venirme, su vagina parecía cascada de tanta agua que sacaba, comencé a nalguearla y gemía como si tratara de que toda la cuadra la escuchara que estaba recibiendo su dosis de verga.
    
    Cuando se cansó de los sentones, bajo a mamármela tan desesperadamente que parecía que era lo más rico que había probado en su vida, mientras se aseguraba de no dejar de voltearme a ver con esos ojos y mirada que a un hombre enamoran, al punto que fue suficiente para hacerme venir. Mi leche le rocío una parte de la cara y el resto lo dirigió directamente a su boca, mientras me masturbaba para exprimir hasta la última gota, y cuando ya no quedaba nada, e intenté pasarle algo para que se limpiará mi semen de su rostro, pasó sus dedos por su cara quitándose mi jugo y llevándoselo a la boca para dejarse limpia.
    
    Tomé a la chica e hice que pusiera su trasero en mi rostro, estaba prácticamente sentada en mi cara, y eso me ponía a full, en cuanto mi amiguito se puso duro de nuevo, comenzó a mamármelo, haciendo un 69 y llevando mi verga hasta la garganta, decidí ponerla en 4 y estuve ...
    ... dándole un buen rato mientras la jalaba hacia atrás por su cuello y hombros, ella gritaba de fascinación y me pedía que la nalgueara, orden que seguía, y metía mi verga lo más profundo posible. La voltee para quedar de misionero y verla como disfrutaba, aprovechando el éxtasis del acto, le metí los dedos y juguetee tan bien que comenzó a temblar, y grandes y espesos chorritos de agua comenzaron a salirle, lo había logrado se había venido. Cuando terminó su orgasmo me miró impactada y volteo a ver mi pene duro, volteo a verme a los ojos y dijo:
    
    - Vente dentro, por favor - lo dijo en tono un tranquilo pero agitada
    
    - Cómo? - respondí atónito
    
    - Por favor, haremos lo que quieras las veces que quieras pero por favor, relléname, por favor - rogaba desesperada
    
    - Sí eso quieres - respondí, no estaba muy seguro pero mi calentura pudo más que mi lógica, así que abrí sus piernas, introduje mi pene y comencé a darle con todo en posición de misionero, al punto que la levanté y comenzó a moverse como loca, realmente lo estaba disfrutando, la tome del trasero y dije - Ahí va - Y le rellene su vagina, a la vez que ella gritaba contenta.
    
    Ese fue la primera y última vez que lo hicimos, puesto que ella tenía una novia, y se sentía mal de volverlo a hacer, pero por casi un mes, no se enojó, no grito, y no hizo dramas por ninguna causa, por mucho que lo ameritaba, lo que me hace pensar que, solo necesitaba buen sexo. 
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