Mi tía Rosario llega de visita inesperada
Fecha: 19/07/2025,
Categorías:
Incesto
Autor: RRuser, Fuente: CuentoRelatos
... fue la primera vez que estaría con otra mujer y aunque estaba nerviosa, era tan caliente como nosotros y sabía que lo disfrutaríamos mucho. Yesica se montó sobre mi tía y empezaron con unos ricos besos, mientras la una a la otra se acariciaban sus hermosos pechos y jugueteaban con sus lenguas. Yo entreabrí las piernas de mi tía y puse mi cara entre sus panochas. Con mi lengua chupaba a una y a otra y ellas movían sus culos tratando que mi lengua entrara más en ellas. A Yesica que estaba arriba le estuve comiendo el ano, pasaba mi lengua y de a poco empecé a meterla y sus gemidos me daban a entender que disfrutaba ese beso anal que le daba. Mi novia levantó una de las piernas de mi tía para unir sus vaginas y estimular sus clítoris, lo cual fue fácil para ellas y al poco rato ya estaban gimiendo y viniéndose intensamente, tan húmedas que escurrían líquidos por sus nalgas. Yo me puse a limpiar esas venidas tan ricas con mi lengua, sus sabores tan deliciosos mientras ellas se decían lo mucho que lo habían disfrutado.
Mi tía me recostó en la cama boca arriba y se puso en cuatro mientras me mamaba la verga, subía y bajaba, yo podía sentir su garganta y la presión que hacía para meterla más profundo mientras apretaba sus dientes y labios alrededor de mi tronco. Yesica se colocó atrás de ella y comenzó a penetrarla con su consolador, mi tía se sorprendió un poco, tragó saliva y le pidió a mi novia que siguiera mientras se sonreían. Mi tía Rosario se esmeraba en mamar más ...
... profundo pero mi novia le arrancaba gemidos con el mete y saca del consolador en su vagina. Nos acomodamos de modo que yo seguí acostado boca arriba, mi novia puso su deliciosa panocha sobre mi boca y me puse a mamarla, mientras mi tía seguía chupándome la verga y recibía el consolador de la mano de mi novia. Pasamos un buen rato así, Yesica se movía a su gusto sobre mi boca hasta que se vino y me bebí hasta la última gota de su orgasmo. Con el movimiento de su mano al poco rato también hizo venir a mi tía con el consolador dentro de su panocha y luego de disfrutar de su orgasmo, Rosario tomó la base de mi verga y empezó a masturbarme sin dejar de mamar. Apretaba tan fuerte su mano y sus labios que me hizo venir y bebió lo más que puedo de mi semen, aunque una buena cantidad escurrió sobre mi tronco hasta la base y sobre su mano, yo solo podía sentir todo eso, pues mi novia seguía con mi cabeza entre sus piernas y movía sus labios vaginales sobre los de mi boca y yo ponía dura mi lengua, estando dentro de ella.
Luego de venirnos los tres, nos recostamos a descansar, platicamos del consolador y dijimos que lo conseguimos en una sex-shop, pues no podíamos contarle a mi tía del asunto con la señora Camila, así que entre plática mi tía nos dijo que algún día la acompañáramos a una tienda así, pues tenía curiosidad por entrar. Platicamos de algunas otras cosas sexuales, de la vez que llegó en la lluvia y que Yesica no estuvo y también nos contó intimidades de su marido y de cómo ya le ...