1. Historias de hospital


    Fecha: 19/08/2025, Categorías: Dominación / BDSM Autor: rickmaster16, Fuente: CuentoRelatos

    Me llamo Vivian. Tengo 27 años, estoy casada hace 4 años. Soy de piel trigueña, cabello castaño y ojos color miel. Tengo una buena genética, de mi padre heredé la altura, 1,79, de mi madre un culo firme.
    
    Soy enfermera y tengo mucho que contar, no se imaginan las cosas que pasan en un hospital. En esta ocasión les contaré algo que me ocurrió con un paciente.
    
    Era un tipo adinerado de unos 40 años al que le habían descubierto un cáncer terminal. Le quedaban un par de meses. Estaba a unos días de salir para su casa a terminar sus días en compañía de sus seres queridos. Me asignaron sus cuidados la última semana de su estancia en la clínica.
    
    La primera vez que lo vi fui a cambiarle unos líquidos por intravenosa.
    
    -Wow, por fin una enfermera como las de los videos - dijo. Lo ignoré.
    
    -Buenas tardes señor, me llamo Vivian y estaré encargada de sus cuidados por esta semana. Cualquier cosa que necesite no dude en decirme
    
    -Vivian… eres muy bella... me agradas
    
    Cada vez que entraba a esa habitación el tipo se deshacía en halagos para conmigo.
    
    -¿Eres casada? - Preguntó
    
    -Sí, lo soy
    
    -Es un hombre afortunado
    
    -jejeje creo que sí
    
    Entré un día de noche. Lo encontré llorando.
    
    -¿Está bien? - Pregunté.
    
    -No… es el final… toda mi vida haciendo fortuna, trabajando, descuidando a mi familia… y ¿Para qué? Al final no queda nada - Dijo.
    
    -Algo debió haber aprovechado con toda esa fortuna que hizo… imagino - Dije tratando de buscarle el lado positivo.
    
    -Bueno… ...
    ... ahora se siente superfluo, pero si algo logré con mi fortuna fue disfrutar de las mujeres más bellas. Ninguna se resiste a los lujos
    
    -Ya veo
    
    -Todos tienen un precio Vivian… el dueño del hospital, el presidente, yo… tú
    
    -No todos tienen un precio señor
    
    -Te lo puedo probar
    
    -¿Como?
    
    -La única emoción que he tenido en estos meses has sido tú, eres hermosa, eres agradable
    
    -Gracias señor
    
    -Quisiera ofrecerte algo… una última jugada para hacer valer toda esa fortuna que hice en mi vida
    
    -¿Ofrecerme que?
    
    Me miró fijamente.
    
    -Vivian. Quiero coger contigo… el último polvo con una hermosa mujer - Dijo.
    
    -Señor no sea irrespetuoso
    
    -No trato de serlo. ¿Cuánto quieres?
    
    Salí de la habitación. Era el turno de noche, no tenía que volver a ver a ese hombre hasta el otro día. Inicialmente me sentí ofendida, yo no era una puta. Pero después de unas horas empecé a revisar el contexto y se me abrieron las agallas. Yo no había sido una persona muy moralista, le había sido infiel a mi esposo dos veces, cosas de una noche, no me involucraba, y aquel trato parecía provechoso. ¿Cuánto valía yo? Era solo un polvo… él no era feo ni desagradable… ¿Cuánto podría pedir? Nadie lo sabría.
    
    Al otro día en la mañana entré a la habitación.
    
    -¿Lo has pensado? ¿Cual es tu número? - Me dijo.
    
    Lo ignoré y salí. Lo pensé todo el día, sabía que entraría de nuevo en la noche. Me armé de valor y de codicia. Cuando entré estaba dormido. Empecé a hacer mi rutina y repentinamente ...
«123»