Una Gran Oportunidad 2da Parte - Relatos Eróticos

Una Gran Oportunidad 2da Parte

... mientras bombeaba con violencia le decía.

-Ahora decime quien es tu macho!!!

-Vos sos, vos!!!, ahah,ahha!!

-Quiero escucharte decirlo!

-Vos sos mi macho, vos me vas volver preñar!.

-Yo te voy a hacer 10 hijos!! Asi cuando los veas a todos siempre te vas a acordar quien fue el mejor macho que tuviste!, total le vas a decir al cornudo de tu marido que son de él asi los va a mantener, entendiste!!.- mientras la continua bombeando con mucha violencia y sujetandola del pelo.

-Si, haceme todos los hijos q quieras! el cornudo de mi marido los va a criar, y no le voy a mentir, le voy a decir la verdad, que me los hiciste vos mi mejor macho.!! AAh, aahh!

Esa frase éxito al flaco de una forma increíble, le aplasto la cabeza contra el asiento y la bombeaba con muchísima fuerza, yo sentía que el auto se movía como si hubiese un terremoto, Lili se quejo: ”Para! Despacio ¡! AAAAHH, AAAAhh”

En ese preciso momento aparece un policía en la ventanilla y golpea la ventana con su bastón. Los dos se asustan

y se acomodan la ropa como pueden.

Entonces el policía les dice a los dos en vos alta. ”La prostitución y tener sexo en la vía publica esta penado por la ley, me tendrán que acompañar a la comisaria.”- y los guía al patrullero.

Yo en el asiento de atrás, tuve suerte de que no me vieran los policías sino tal vez me llevaban, asi que me quedé ahí esperando como una hora hasta que me llamaron.

Cuando llegaron a la comisaría, los separan, y a Lili la llevan ...

... un lugar que parecía un consultorio médico con una camilla en el centro, cerca de unas celdas donde había prisioneros. Ellos cuando vieron pasar a Lili se pusieron como locos a gritarle groserías. La médica policial, era una mujer gorda tenía alrededor de 50 años de edad y modales rudos.

Cuando entraron al consultorio, le ordeno a Lili con voz firme. “Dale apurate nena!, sacate la ropa y acostate en la camilla que te tengo que examinar”. Lili ve que cruzando el pasillo hay una celda con un preso, q se empieza a pajear, entonces un poco avergonzada pregunta.

La gorda le da un vaso de agua con una dosis de un remedio que se les da a las yeguas para excitarlas. Mientras la manosea a propósito para hacerla calentar, Lili gime y se arquea.

En un momento la gorda se da vuelta para llenar un formulario y el preso que estaba a un par de metros acaba abundantemente y le arroja un poco de semen q llega a la pierna de Lili, ella que ya estaba sintiendo el efecto del medicamento que le dio la gorda, levanta el semen con una mano y se la lleva a la boca y se lame la mano como si fuera un helado, mientras mira al preso de forma sensual.

La gorda tomo un artefacto del estante, era una bombita de succión, y le hablo con tono dulce por primera ves: “Mi amor, Si queres... con esto te saco todo el semen que te metió Juan, y te dejo limpita para que tu marido no sospeche”. Lili ya vestida, se pone las dos manos en la pansa le dice, “No, que desperdicio, gracias, me encanta tener la ...