1. Violado en el Torito, ¿o no?


    Fecha: 26/08/2025, Categorías: Gays Autor: soyAriel, Fuente: CuentoRelatos

    ... a presionar en la entrada de mi culo, la cabezota de su verga intentando profanar mi virgen agujero, sentí que vencía la resistencia de mi esfínter, se abría y se colaba dentro de mi ser, dolía mucho, pero no tenía escapatoria, estaba fuertemente sujeto, el enorme hongo hacía una presión bestial, de pronto sentí como se forzaban al máximo mis pliegues y entró toda la cabeza, fue el dolor más grande que haya sentido jamás, como si una estaca de hierro al rojo vivo me rasgara las entrañas, mi vista se nubló y tuve que morder la colchoneta para ahogar mi grito, mis lágrimas corrían por mis mejillas, todo mi cuerpo se tensó, me retorcí y traté de zafarme, sin éxito, me empujó la cabeza contra la colchoneta que casi me asfixia y dobló mi otro brazo, era imposible zafarse, sus brazos me sujetaban con firmeza y el peso de su cuerpo me mantenían inmóvil, se inclinó pegando su pecho en mi espalda para susurrarme al oído.
    
    ,- Tranquila bebita, quietecita, relájate, ya pasó lo peor, tienes toda la cabeza dentro, no aprietes, o te voy a romper el culo, aflójate, aguanta, relájate y disminuirá el dolor, no voy a seguir metiéndola, esperaré a que tu culito se acostumbre al diámetro de mi verga, confía en mí.
    
    El dolor era inmenso, pero decidí confiar, no podía hacer otra cosa, así que aflojé las nalgas con la esperanza de que el dolor disminuyera, lo notó y expresó:
    
    - Bien nena, así, ponte flojita y relájate, pronto calmará el dolor y sentirás placer, cree en mí.
    
    Sentía su ...
    ... verga abotonada dentro de mí, palpitaba, besaba mi cuello y espalda, metió su lengua en mi oído y una corriente de electricidad recorrió todo mi cuerpo, mi cuerpo se relajó aún más y el dolor cedió un poco.
    
    - Ya te duele menos- preguntó
    
    No respondí, pero moví mi cabeza en señal afirmativa.
    
    - Lo estás haciendo muy bien nena, pronto estarás gimiendo de placer.
    
    Empezó un vaivén muy lento, la sacaba un milímetro y avanzaba dos, sentía como mis pliegues internos se iban abriendo, dolía, pero era soportable, me fui acostumbrando al lento vaivén, aunque ardía, empecé a sentir un calor interno, y el roce de la cabeza de su verga en mis paredes internas era cada vez más agradable, poco a poco empecé a sentir placer.
    
    - Ya te empalé hasta la mitad, falta poco nena.
    
    Hasta la mitad, pensé, si me sentía completamente lleno, no había forma de que me entrara más.
    
    - Tranquila, prometí que no te iba a lastimar, muévete tú y entiérratela hasta donde puedas.
    
    Así lo hice, empecé a moverme, movía mi culo lentamente en forma circular y hacía adelante y hacía atrás, cada vez entrando más profundo, seguía doliendo, pero cada vez era mayor el placer, llegó un momento donde ya no podía meterla más, sentía que topaba con algo en mi interior, así que hasta allí llegué, entraba y salía lentamente y empecé a gemir, estaba disfrutando la cogida.
    
    Entonces me tomó de la cintura con ambas manos y dio un golpe de cadera hundiendo toda su verga en mi culo, no pude evitar dar un grito de ...
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