Hasta en vacaciones hago cornudo a mi marido
Fecha: 29/08/2025,
Categorías:
Infidelidad
Autor: soyAriel, Fuente: CuentoRelatos
... sacaba, lo escuché gemir, gruñir de placer y me dijo:
- Ayyy, que rico, ninguna hembra me había hecho gozar así, aghhh, apriétame la verga mami, aghhhh, que rico, aprietalaaa
La sincronía era total, aflojaba el culo todo lo que podía para que me entrara lo más profundo y apretaba cuando salía, ambos aullábamos de placer, los embistes se fueron haciendo más rápidos hasta que por fin anunció su corrida, aghhh,
- Ya viene la lecheee, aghhh, me vas a sacar la leche, aghhh
Me dio una última estocada profunda y apreté el culo con más fuerza, de inmediato sentí su verga ensancharse y su esperma caliente, muy caliente, llenando mis entrañas, ya no pude más y llegué a un delicioso orgasmo, mis piernas temblaban y espasmos recorrían mi cuerpo, sentí un desvanecimiento, y luego me sentí totalmente relajada, su cuerpo sobre el mío temblaba, su verga fue perdiendo firmeza dentro de mi culo, hasta que salió de mi culo, junto a un poco de su semen que escapó y escurrió entre mis piernas.
Me tomó de la cabeza y me dio un beso cachondo, jugoso en agradecimiento, su cara irradiaba felicidad, me dijo que nunca había disfrutado tanto, que lo había hecho acabar como nunca y que le había sacado la leche sin su voluntad, que prácticamente yo me lo había cogido a él con mi culo y lo había vuelto loco de placer.
Me sentía cansada y me hubiera quedado dormida, pero no era posible allí, así que me tuve que incorporar con su ayuda y me dirigí a las regaderas, mi culo ardía, me lo ...
... dejó lleno de él y su semen escurría entre mis piernas, una vez en la regadera aflojé mi esfínter y lo dejé escapar, sentía delicioso como escurría entre mis piernas, caliente y espeso, abrí la regadera, para limpiarme.
Él también se metió a bañar a las regaderas de hombres y salí del vestidor de mujeres con una toalla, mis trajes de baño ya estaban secos, y me puse uno, quedamos de repetir al otro día, lo cual se repitió en cada uno de los días restantes.
Con mi traje de baño puesto me dirigí a la alberca a tumbarme en un camastro, exhausta, pero relajada y contenta, Massimo les pidió a los camareros que me trataran en forma especial y fui tratada como reina, recibía bebidas tan pronto me acababa una, trato que se hizo extensivo a mi esposo cuando estaba conmigo.
Los días restantes la cogida fue en mi habitación, tan pronto se marchaba mi marido, me iba a mi habitación, llegaba Massimo y me daba unas cogidas fenomenales.
En ocasiones me remordía la conciencia, mi pobre marido en el Congreso, me había llevado sin que fuera su obligación y yo le pagaba adornándole la frente, pero también pensaba que no podía dejar pasar la oportunidad de ser cogida por un macho así, ¿acaso un hombre hubiera dejado pasar la oportunidad de cogerse a la chica de sus sueños?
Terminó el Congreso y regresamos a nuestra ciudad.
En el vuelo de regreso le dije a mi marido que me había encantado el hotel y que me gustaría repetir.
- A mí también me gustó, tiene una excelente relación ...