Mi esposa le da el culo a su primer amor 5 - Relatos Eróticos

Mi esposa le da el culo a su primer amor 5

... entrañas, sentí varias palpitaciones y yo tuve otro orgasmo, nos quedamos acostados el encima de mi, no se despegó, su cuerpo cubría toda mi anatomía como una manta, pasaron cinco minutos y todavía acoplados  nos pusimos de lado en posición de cucharita por unos minutos, luego levantó mi pierna izquierda y la pasó por encima de su cabeza quedando él entre mis piernas, toda esa maniobra la hizo sin despegarnos, en el giro sentí el movimiento de torsión que hacía su verga en mi culo de lo apretado que estaba, me levantó las piernas y las puso en sus hombros, comenzó a empujar suavemente, después de unos minutos de tener su verga dentro de mi recto, ya dilatado, el dolor ya no era tan intenso y le dije que podía continuar pero mas suave, así lo hizo, fue metiendo su largo miembro nuevamente, ya mi recto se había amoldado a su grosor, colocó ahora mis tobillos al lado de mis orejas y comenzó a besarme y a decirme muchas palabras bonitas que tu ya no me dices y que cada vez me sentía más excitada, me decía que fuiste el hombre más afortunado del mundo por haber conquistado a una  mujer tan hermosa  con un trasero que todas las chicas quisieran tener y que desde ahora iba a ser su puta, por la emoción de escuchar esas palabras algunas lágrimas salieron de mis ojos, me trató con mucha ternura diciéndome que me amaba, eso me llegó muy profundo a mi corazón, me sentí tan amada y orgullosa que a pesar de que me iba a doler le pedí que empezara a moverse mas rápido, sentía muy rico el ...

... tener su verga totalmente incrustada dentro de mi recto que ya se deslizaba con mayor facilidad debido a la mantequilla derretida por el calor de mi cuerpo que cuando lo  sacaba sentía que parte de mi se escapaba y se producía un sonido de succión, pero nuevamente me llenaba al introducirla con suavidad, lo sacaba y lo metía produciendo nuevamente ese sonido, me gustó mucho escucharlo, ese sonido de chapoteo que se producía por la mantequilla dentro de mi intestino grueso, empezó a sacar y meter solo su glande con certera puntería sin usar sus manos en mi culo, el mismo venía acompañado de algunos pedos y de algo más, sin dejar de besarme, agarrándome por los tobillos puso su cuerpo en una posición erguida, la punta de sus pies era lo único que tenía contacto con el colchón y comenzó a mover todo el largo de su tronco flexionando solo la parte de su pelvis y a meter y sacar todo el largo de su monstruosa herramienta dentro de mi recto , después de media hora de estar rompiéndome el culo lo introdujo en su totalidad, eyaculó nuevamente, cerró los ojos y su rostro se transformó, se puso colorado, sus venas en su rostro se hincharon hasta que terminó exhalando un gran quejido y yo otro producto de mis incontables orgasmos, creo que se escucharon en las casas de alrededor, se derrumbó encima de mi casi aplastándome y yo todavía con mis tobillos en las orejas, en esta posición tanto mi vagina como mi culo quedaban totalmente expuestos, no se despegó de mi cuerpo hasta tres minutos ...