Madura discapacitada primeriza ocupó mantenimiento cuando yo era joven - Relatos Eróticos

Madura discapacitada primeriza ocupó mantenimiento cuando yo era joven

... haberla ido a ver en realidad y mantenía mi postura de estar con ella íntimamente, eso le elevaba su autoestima y me lo dijo con lágrimas en los ojos, me sentí un poco mal porque no me di cuenta que había un ser humano sensible más que un objeto sexual, ella notó mi semblante y me pidió algo enojada que no la viera con lástima y que en éste momento la viera como una hembra, porque lo que más deseaba era ser tomada y sentirse mujer otra vez, que lo necesitaba más de lo que yo creía, le prometí que no habría trato especial y que le haría todo lo que mis conocimientos sexuales y experiencias me permitirían, ella asintió y después de dejar encargado su negocio nos dirigimos a un hotel cercano, el problema fue el transporte porque ningún transporte público pasaba cerca y tuvimos que tomar un taxi, el taxista amable nos ayudó con la silla de ruedas en su cajuela y se sorprendió bastante cuando le dije que nos dejara en el hotel más cercano, aunque no dijo ni una palabra su mirada lo decía todo, lo curioso es que  chófer no quitaba la mirada de mi pequeña amante cuando le dije lo del hotel, ella lo notó y pude ver semblante de orgullo acompañado de una sonrisa picarona, eso lejos de darme celos me dió gusto porque sentí que estaba con una mujer normal que podía ser deseada cómo cualquiera otra, ya que si tenía un poco de vergüenza al que dirán, al verme entrar al hotel con ésta dama tan peculiar.

Llegamos a un hotel tipo garage, le pedí al encargado que nos dejara meter el ...

... taxi en reversa para bajar la silla de ruedas, su sorpresa se notó también en la chica que nos dió las llaves y el control remoto, pagué al taxista y le di una propina, lo mismo a la encargada, entramos y Gina (según recuerdo así le decían los amigos), estaba muy sorprendida, era su primer hotel, los dos estábamos iguales de nerviosos, llevé su silla a la orilla de la cama y me acerque a besarla, el beso me supo mucho a cigarro, ya había olido que fumaba mucho aunque ella trató de disimularlo con pastillas para el aliento, pero no me hiba a detener por algo tan trivial a éstas alturas, ella lo notó y me dijo que si le daba asco, le dije que asco no pero olía un poco a cigarro pero que no había problema que no olía mucho (la verdad es que todo su cuerpo destilaba el olor a cigarro), la acosté y comencé a desvestirla, ella me ayudó y su respiración se agitó, los latidos del corazón podía oírlos cuando me acerqué a mamar sus pechos, estaban riquísimos, los botones de la blusa apenas podían retenerlos, después de mamarlos un buen rato, le ayude a quitarse la ropa con cuidado debido a su anatomía, una vez que llegué a la ropa interior noté una tanga bien metida entre sus nalgas, por adelante traía un panti protector y le pregunté si estaba en su periodo, me dijo que no pero que se ha estado mojando mucho desde que charlamos, la voltee con cuidado y la penetre con el cuidado de no lastimar sus extremidades inferiores que estorbaban un poco en esa posición, lo hice con el condón ...