El negro que más odiaba se quedó con mi madre (Parte 3)
Fecha: 13/11/2018,
Categorías:
Erotismo y Amor
Autor: Chico23, Fuente: CuentoRelatos
... prejuicioso en etapa final.
Yo: Disculpen por interrumpir tan amena plática, pero debemos irnos mamá me comenzó a dolor la cabeza y el estómago.
Mamá: ¿En verdad? Eso te pasa por no comer bien a tus horas y desvelarte mucho.
Yo: Si madre, lo lamento pero la universidad consume casi toda mi energía, tú debes saberlo mejor que nadie.
Mamá: Es verdad, tienes razón, vámonos casa entonces para que te recuestes un rato y te tomes una pastilla para el dolor.
Yo: Bueno compañero (le dije a Zantiago) nos vemos la próxima en la escuela (haciendo gesto de triunfo por haber podido romper esa platica entre el negro y mi mama)
Zantiago: Si hermano nos vemos en la universidad (con tono de resignación y algo de molestia)
Así salimos en el auto rumbo a casa, pero mientras las calles y semáforos transcurrían no me quitaba de la mente la cara del negro cuando mi madre le comenzó a contar cosas sobre la vida de ella, de tal manera que hasta cosas mías le comento que llegarían a ser una completa molestia total en el futuro. Pasaron 5 minutos y ninguno de los dos hablamos hasta que yo decidí romper el hielo...
Yo: Mamá ya no quiero ir al gym, este tiempo que ocupo en ese lugar, debería ocuparlo para relajarme ya que como dije mis estudios me consumen tiempo y sobre todo energía física, así que no le veo el caso desgastarse aún más.
Mamá: Deberías seguir, es una forma en la que tomas condición física más estable, además para que no andes de holgazán en casa, ya que ...
... los estudios es tu deber pero te la pasa todo el día cuando no vas a clases mirando tv o en el internet (típico regaño de madre al hijo común)
Yo: (Haciendo un gesto de disgusto)
Mamá: Jajaja que flojo eres cariño
Y así llegamos a casa y el término del día transcurrió con normalidad.
A la mañana siguiente, día de universidad, mi madre dijo que pasaría por mí para ir a almorzar.... todo en orden, clases, estudios, todo normal, llego el momento en que mi mamá se dirigía a mí, y me sentía relajado... ¡no era para más! Zantiago no había aparecido en todo el día, pero nada es para siempre...
Zantiago: ¡Heey amigo!
Yo: (No, carajo, no)
Yo: Ah... hola negro ¿qué tal?
Zantiago: Muchas clases tuve pero veo que esperas a alguien porque ya te hubieras ido... dejame adivinar ¿esperas a tu mama verdad?
Yo: Pues... si, así es, quedamos de acuerdo en ir a almorzar
Zantiago: Oh que bien, dos muchachas juntas van a comer.
Yo: Disculpa... ¿qué dijiste? (con tono de enojo)
Zantiago: ¡Oh nada nada disculpa! (con tono sarcástico)
En ese momento el claxon del auto de mi madre sonó enérgicamente.... ¡al fin ya me iría de ahí!
Mi madre bajo el espejo y dijo que subiéramos, pero noto la presencia de Zantiago y seguido de eso, el negro la saludo con algarabía, con lo que ella también le regreso el saludo, yo me subí deprisa al auto y le dije a mi mama que se nos hacía tarde (era la única opción para irnos lo más antes posible)
Zantiago: ¿porque tanta prisa ...