Me convertí en el sustituto de su mujer.
Fecha: 16/11/2018,
Categorías:
Gays
Autor: nastyjulio22, Fuente: SexoSinTabues
... vieja guanga -Yo: Si, si, quiero que me posea y sea mi dueño -Don Teo: En esta cama me vas a cumplir como mujer, cada vez que vegas Rafita, en esta cama donde mi vieja y yo procreamos a nuestros hijos -Yo: Si, yo acepto y quiero que imaginemos que usted y yo podemos tenerlos. -Don Teo: ¿Quieres que te haga un hijo? -Yo: Si, quiero tener un hijo suyo Don Teo En ese momento, me acomode de espalda, abriendo mis piernas y ayudado con mis manos le ofrecí mi cuerpo para que lo tomara. Él se puso frente a mi, con su verga en su mano derecha al full apuntando a la entrada, se escupió la otra mano, lubrico con dos de sus dedos y lentamente fue entrando. Yo no me preocupe por el dolor, creí que mi experiencia sexual me ayudaría a aguantar su animalote, pero no. no fue así, su pito era muy grueso y grande, en cuando su grande apenas se abría paso para el resto, yo sentí que no podía mas y grite, Ahhh me esta partiendo en dos Don Teo, despacito por favor!… él, me miro, y se detuvo, me volvió a besar, diciéndome al oído, como si no quisiera que nadie lo escuchara, que lo haría lento, pero que tenia que poseerme como yo se lo había prometido. Volvió a su posición, y arqueando su espalda, de forma pausada dejo caer su cuerpo sin remedio para meterse por completo. Yo grite, nooooo! Pero a medio entrar, quede afónico, no podía hablar, estaba mudo, cuando por fin sentí sus huevos en la entrada de mi ano, perdí el conocimiento por unos segundos y gire mis ojos hacia arriba, como buscando ...
... dentro de mi craneo el alivio al dolor, cuando volví, ya daba inicio el mete y saca que me reconforto, pero por momentos dolía, giraba mi cabeza en forma de negación, pero al cabo de unos minutos, todo fue placer, mi culo acepto a su dueño ya sin reparo. El sentir como su pedazo de hombría batía mis entrañas, me causaba escalofrió, mis pezones se hincharon y se ennegrecieron por el rubor de la sangre, empujaba mi cadera contra su pelvis tan frenéticamente que la cama rechinaba, en eso, sin querer me tope con la miraba de la señora que me veía a mi con una miraba perpleja, y mientras él trabajaba, yo la miraba a ella y observaba las fotos de la habitación, su boda, el bautizo de sus hijos, las fotos con sus nietos y las de sus bodas de plata y todo aquellos me calentó mas, pues me sentía realmente una mujer; le sonreí y mire a mi hombre a la cara, quien en franco acto, me sonreía en éxtasis, yo le correspondía juntando con mis manos mis senos ofreciendocelos, estos se mecían en cada embestida, los besaba, me mordía me decía cosas lindas al oído. Se podía decir que no solo cogíamos, me estaba haciendo el amor. Luego de 10 minutos en esa posición, se coloco a la orilla de la cama con sus pies colgando y me pidió que lo montara, pude ver que las sabanas estaban ensangrentadas y sucias con un poco de excremento; me paré sobre el colchón y sin mas, desde esa altura, procurado atinar, me deje caer, clavándome en su masculinidad, Uff!, que rico sentir como me raspaba las columna, esa era ...