Mi nombre es Kathy y que puta soy - Relatos Eróticos

Mi nombre es Kathy y que puta soy

Después del espectáculo en el que me golpearon, me encontraron tirada en un charco de orine que había hecho con ellos , y luego me arrastraron de nuevo a una mesa donde el resto de los hombres que no me habían jodido tomaron su turno para hacerlo entonces. Mientras me follaban, otros seguían azotándome, pasándome el látigo por la espalda y el culo mientras estaba de 4 y horcada  y hombres, sobre mis tetas cuando me llevaban de espaldas sobre la mesa. Ahora todas las personas en la habitación me habían follado, mi cabello estaba enmarañado con semen seco, estaba por toda mi cara y labios, me dolían las tetas por los continuos mordiscos y pellizcos, y estaba cubierta de látigos, marcas de mordiscos y semen. todo sobre mí. Simplemente me quedé allí, con las piernas separadas, jadeando y gimiendo, untando el lío pegajoso en mi cuerpo, frotando y tocando mi coño goteante y bien jodida de mi culote.

Mientras yacía allí, con el semen saliendo de mi coño abierto y mi culo agrandado, uno de aspecto duro se acercó y me dijo que me estaba preparando para el entretenimiento final. Mis ojos se abrieron cuando vi su burro en este gran consolador. Debía tener al menos catorce pulgadas de largo y seis pulgadas de espesor. Me sujetaron mientras el estiraba mi coño con él, ignorando mis gritos. Me estaba estirando pero el placer era intenso. "Estarás lista después de esto", se burlaron de mi mientras el burro me follaba ferozmente con su polla gigante. Continuó durante unos diez minutos, ...

... hundiéndolo hasta el fondo de mi. Cuando el se retiró. Me quedé tirada allí gimiendo, con mi coño muy abierto. "Ahora estaba lista para el polvo final", dijo, con uno con una sonrisa en su rostro.

Nuevamente me arrastraron fuera de la mesa y por el suelo, mi trasero y mis tetas rasparon el suelo áspero a través de toda la cerveza y la suciedad que había encima y afuera. Luego, mi cuerpo desnudo y flácido fue arrastrado por el barrio hasta mi cabello observaba los meados del campo donde me llevaban A un par de caballos a un banco. Comencé a luchar los cuando los vi. Me dijeron "Así es, escore A esos caballos te van a follar para nuestra audiencia, y ambos tienen pollas grandes", gruñe  y luego se rieron mientras me escupían en la cara. Algunos de  me estaban pateando. por el culo o en el coño, otros escupían y mieban sobre mi cuerpo sucio mientras me arrastraban. "Muévete, puta, ahí esperando su cogida", gritaban. Me arrastraron hasta el banco sobre mi espalda, y mis brazos y piernas atados a cada pata de la esquina del banco, bien separados con mi trasero ligeramente colgando del borde y mi coño bien abierto.

El primer caballo fue llevado y olió mi coño cubierto de semen almizclado. Subió poniendo sus patas delanteras a cada lado de mi cuerpo parado sobre sus patas traseras entre las mías. Pude ver su gigantesca polla sobresaliendo de su funda debajo. Luché contra las cuerdas, "no sirve de nada luchar", dijo uno de los hombres, "vamos a disfrutar viendo cómo actúas para ...