1. ¡ASÍ VALE LA PENA FESTEJAR!


    Fecha: 08/01/2024, Categorías: Hetero Tus Relatos Autor: CARAMELO, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X

    ... pija mientras me estaba descargando. Ella estaba agarrada con las dos manos a las sábanas, evitando que yo la aplaste contra la cama…, pero no hubo caso. Se estiró sobre ella y yo quedé sentado sobre el culo. Cuando sentí la flacidez salí lentamente. 
    -Abrime los cachetes. Vas a ver como expulso el semen. Podés comértelo si querés. ¡Jajaja! ¡Es rico! ¡Jajaja! - Anita gozaba de gozar. 
    Efectivamente, el hoyo chorreaba semen. Hice lo que me dijo. Puse mi boca y chupé. No es desagradable. Yo gozo del placer de sentir que me trago lo que a ella tanto le gusta. Pero guardé en la boca todo lo posible. Fui a ella y la levanté sobre mí para besarla. Con placer transferí el semen a la suya. Anita tragó embelesada.
    -¡Gracias papito! ¡Sos un ángel! - Y nos quedamos tirados sobre la cama, pegados, cuerpo contra cuerpo.
    -¡No te movás! – Fui sobre sus muslos a lamer. Todavía quedaba bastante. ¡Tantos orgasmos!
    	Volví a su lado. Ahora fue su flujo que transferí. Seguimos con los besos y caricias.
    -Cuando me la metás en la concha, no te olvidés de meterme el dildo en el culo… - La hembra no olvidaba nada…
    
    -Bueno, ahora tenés que contarme cuando fue la primera vez que mamaste una pija. – Quiero conocer esa historia. 
    -Ah, sí, hace mucho, mucho… 
    -¿Cuándo?
    -Y…, estaba en la mitad de la primaria…, en una fiesta familiar… Bueno el 90 % de las mujeres que conozco debutaron sexualmente en alguna fiesta familiar…
    -Claro, como casi siempre, una fiesta familiar… ¿Un hermano, un ...
    ... primo?
    -Y si… Casi primo. No era primo de sangre, porque era sobrino del marido de una hermana de papá. Pero como era el cumple de 80 de mi abuela, invitaron a medio pueblo. Como tantas otras veces, los chicos, y no tanto, como algunos más grandes…, que no querían perder la oportunidad de manosearse, sean chicos o chicas, jugábamos a varios juegos…, uno de los cuales…, el más solicitado, por razones obvias, era el “escondite”. Y así fue, parece que yo estaba bastante tentadora…
    -Si serías la décima parte de ahora, no me cabe la menor duda.
    -¡Jajaja! Bueno, puede ser. Siempre fui bastante rellenita. Con culito y jamones de nena más grande. 
    “Bueno, en el juego…, por razones “ocultas…” ¡jajaja…! este muchacho, que andaría por tercer o cuarto año del secundario, siempre quería “esconderse” conmigo… ¡Jajaja! Y se preocupaba para que estuviéramos bien escondidos… y bien juntitos, aunque la casa era muy grande. Tan juntitos estábamos, que yo sentía en el culito, sobre la ropa, por supuesto, algo que me apretaba entre los cachetes… ¡jajaja! ¡Por entonces no sabía que era! Aunque si sabía que los nenes tienen pito… Lo había visto en bebés. Bien, este chico, llamado Raúl, era muy “cariñoso” conmigo, además de escondernos bien, me apretaba contra su cuerpo. «Para que no nos encuentren.» Entre paréntesis…, a mí me gustaba mucho este chico…, y me ponía contenta que me zalamereara tanto. En una de esas “escondidas” a mí se me ocurrió preguntarle con que me apretaba la cola. Y él me lo mostró, ...