1. Con los amigos de mi esposo


    Fecha: 25/03/2024, Categorías: Infidelidad Tus Relatos Autor: Roberta, 35, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X

    ... cogerte, por favor, déjame cogerte’. Y ni como negarme, estaba excitadísima, mojada y al ver su miembro no podía no querer probarla y los otros lo alentaba, le decían ‘sí, cógetela, que se la coja, que se la coja’ entonces uno de ellos separó mis piernas, con suavidad y el otro se puso un condón y puso la punta de su pene en la entrada de mi vagina, sentirlo así de duro, me hizo mojarme de inmediato y más cuando la empujó, su grosor era increíble, comencé a masturbar a los dos de mis lados con mayor fuerza y a chupársela al otro con más vigor y me decía ‘pfff roby, estás apretadísima, que delicia, te voy a dar con todo’ y así lo hizo, me estaba cogiendo hasta el fondo con fuerza y comencé a gemir, estaba en el paraíso. Luego de unos 10 minutos me dijo ‘roby, voy a terminar ¿me dejas correrme en tus chichotas?’ yo solo asentí porque todavía tenía el pene del otro en mi boca y mis manos ocupadas, se quitó el condón y comenzó a masturbarse, enseguida soltó un fuerte chorro de semen sobre mis pechos, lo que no desperdicio, porque la mayoría cayó justo en medio y lo ocupó para lubricar el espacio y acomodar su pene, se masturbó con mis pechos, cuando se comenzó a poner blando se apartó con una enorme sonrisa.
    Los otros 3 hicieron casi lo mismo, cogerme, masturbarse en mis pechos, ponerla en mi boca y correrse sobre mí. Estábamos exhaustos, me pedían que lo repitiéramos en alguna ocasión, y yo sinceramente no pude negarme, los 4 están buenísimos, guapísimos y pitudos. Unas ...
    ... horas después llegó mi hija y los 5 estábamos en la cocina platicando y riéndonos de lo que habíamos hecho, saludó y dijo que iba a su cuarto a terminar su proyecto de la escuela. Justo cuando ya se iban, uno me pidió pasar al baño y cuando se fue me acordé que no había papel y subí a decirle y pasarle uno, pero, para mi sorpresa, no estaba en el baño, sino en el cuarto de mi hija, me escondí rapidísimo para que no me viera, pensé que le iba a decir a mi hija lo que acaba de ocurrir, pero no, escuché una pequeña conversación inquietante:
    Él: sabes que me encantan tus melonsotes, ya no puedo esperar para volver a cubrirlo de semen
    Ella: si lo sé, pero esta semana no puedo, tengo exámenes. Y sí, tu pitote es el más rico que he probado, mira ya como lo tienes
    Él: solo por ti mi tetonsota sabrosa, ¿no quieres darle una lamida rápido? Mira, te está hablando, salúdalo 
    Ella: ummm hola amigo, ¿me extrañaste? 
    Él: ufff, así, métetelo todo, te ayudo
    Ella: ummm mmm aaah, oyee, no hagas eso, sabes que la tienes enorme y me dan ganas de vomitar.
    Él: jaja no lo pude evitar, la mamas delicioso, peor ya tengo que irme. Hacemos videollamada al rato ¿va? Te pones algo sexy para que me hagas un espectáculo, sobre todo con tus mamilotas. 
    Ella: jeje vale, mi mamá me llevó por ropa la semana pasada y unas tanguitas. Te hablo como a las 9. Ya vete.
    Pero esa historia se las cuento luego, porque me enteré de qué tan profunda es su relación. Espero que les haya gustado mi historia. 
«12»