Mi primera vez, con mi mejor amigo de la secu - Relatos Eróticos

Mi primera vez, con mi mejor amigo de la secu

... succionaba mi verga al mismo tiempo que sentía cavidad caliente, dos o tres veces me hizo sentir que iba a perder la fuerza en las piernas por la forma en la que me la chupaba, y también gemi sin querer en varias ocasiones. 

De pronto, se detuvo en seco, no sabía por qué se detuvo, se levantó y me miró asustado, se puso al lado mío y luego hizo como que orinaba en el urinal, escuché los pasos de personas que venian al baño, lo bueno que el se había percatado, si no habrían entrado y nos habrían encontrado en esa escena en el baño de la escuela. Mi amigo termino de orinar y yo solo hice como que había orinado, cuando el se guardo la verga yo hice lo mismo y lo seguí fuera de los baños, quise hablar con el sin embargo sus pasos eran rápidos y yo no sabía que decir, lo ví salir de la escuela y dirigirse a su casa, sin decirme una palabra, creo que en parte le había dado pena lo que acababa de ocurrir y yo tampoco sabía cómo procesarlo. 

***

Camino a mi casa no podía dejar de pensar en lo que había pasado, mi mejor amigo me había hecho una mamada, la cual a mí me había gustado, y ahora traía el pene duro y con saliva de mi amigo. Me sentía confundido, entre arrepentido por dejarme chupar la verga y furioso por qué no terminó. Llegué a mi casa después de caminar poco más de un kilómetro hasta ella. Sudoroso me metí al baño y abrí la regadera* me desvesti y dejé el baño con olor a sudor, testosterona y semen. Me hice la mejor paja que me había hecho en años, y pensaba en ...

... mi amigo, en su culo enorme, en sus labios carnosos que habían estado en mi pene, en su pecho que sabia que tenía vellos por que lograba verlos a través de su camisa desabotonada cuando jugábamos fútbol, en su abdomen definido, ese que tenía una línea de vellos que salía desde sus genitales hasta su ombligo, y de la silueta que dibujaban sus hombros varoniles que tenia que ver a diario en la escuela frente a mi pupitre. 

Termine, con el profundo sentimiento del arrepentimiento que deja el masturbarse pensando en cosas morbosas de cualquier tipo. 

Después de la culpa vino ese sentimiento de injusticia, me sentía tonto por que no lo ví venir, por que me di cuenta que me habia llevado hasta donde el había querido con toda la alevosía y ventaja que pudo, tonto por haber dejado que se aprovechará de mi de esa manera, y al mismo tiempo con el hecho de que yo no había visto nada de el, quería verle el culo, y las bolas, y el pene y los pezones (que alguna vez ya se los había visto) pero igual quería. Poco a poco me fui durmiendo en el calor de mihabitacion hasta la mañana siguiente. 

***

De regreso a la secu al día siguiente, no sabía cómo actuar, me dirigí al mismo pupitre que siempre, con la esperanza de que el se sentará nuevamente enfrente mío (lo hizo). Sin embargo lo hizo sin mirarme, y de mala gana, no dirigió ni una sola palabra. 

Durante el almuerzo fue igual, no se acercó a nosotros ( a nuestro equipo de 6, que llevabamos ya años estando juntos) 

-que le ...