1. El chacalito principiante


    Fecha: 28/06/2024, Categorías: Gays Tus Relatos Autor: Rafael, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X

    ... completa en ese culito firme, oscuro, sin vellos. Casi me desmaya.
    
    Alejandro se quedó quieto como si le hubiera metido un hierro en el culo. Mi lengua hurgaba cada esquina mientras con mis manos amasaba esos globos musculosos. Le pedí que levantara su traserito para poder lamerlo mejor, y el chacalito se comenzó a menear suavecito. "Culo rico, manéate que se nota que te gusta !" "Ábrete con las dos manos para que mi lengua te babee mejor." "Abúsate que ahora te voy a poner a gozar !"
    
    Saqué mi botellita de lubricante. Me di cuenta que la hierba lo tenía bien bateado, los ojos le brillaban y el machito tenía la pija durísima. Le puse una almohada debajo para ver su culito abierto, con el huequito brillante de mi saliva. El chacalito estaba tan apretado que mi dedo no podía meterse facilmente. Quería untar de lubricante su hermoso y cerrado huequito. Con mi experiencia logré meterlo completo lubricandolo profundamente. Con otro dedo y con saliva pude ver el interior rosadito de su recto. Ufff ! solo de verlo la verga me dolía de lo dura que la tenía !
    
    Le puse la cabeza de mi pene en la entrada de su ano y empujé despacito. Alejandro no decía nada. Mi pija empezó a hacerse camino entre sus nalgas y pude meneársela subiendo y bajando, dejando que mi miembro resbalara por ese huequito. Con mi peso lo mantuvo acostado bocabajo en la alfombra y él se quejaba quesito. Poco a poco le fueron entrando mis casi ocho pulgadas de verga dura e inflamada. Se la saqué un segundo ...
    ... para mirar. Su ano parecía una O, oscurito, con el centro rojo.
    - "Te gusta bebe ?", le pregunté.
    - "Me duele mucho... me quema !..."
    
    Lo dejé descansar un ratito y luego comencé el mete y saca. Le daba pija. Él se quejaba... pero se dejaba. Lo llevé al sofá y lo puse en cuatro. Ahí seguí chuléandomelo y paseándolo, sobándole los huevitos y diciéndole todo lo que ma pasaba en la cabeza. Ver ese chico tan tiernito, tan sumiso y abierto me ponía súper arrecho. Demasiado. Me vine una contracción en los testículos, tan dura que me dolieron. Sentía mi leche pasando directamente al centro de su culito que él me apretaba con ganas.
    
    Los dos estábamos arrechísimos. Yo saqué con cuidado mi verga de su ano y ví como le chorreaba la leche como un volcanito. Un poquito de sangríta, no mucha. Traje pañitos húmedos y lo lavé con cuidado. Dejé que reposara un ratito. Asombrosamente su pene no bajaba. Cierto... no se había venido ! Así que comencé a mamarlo suavecito. Su verga estaba durísima. Acariciando sus testículos empecé a pajearlo con la boca, arremangando su prepucio con mis labios. Sentí como mi paja bucal lo excitaba. Su pene entraba profundamente en mi boca hasta que el chacalito disparó un chorro de leche caliente y espesa. Muy espesa, tanto que ni siquiera corría. Ese pelao podía preñar a tres yeguas con una sola venida !
    
    Saboreé su semen blanco y grueso, parecía leche condensada, como si él no se hubiese venido en semanas. Eso fue el primer día de sus vacaciones en el ...