Mi aventura con el cliente de Onlyfans en un club Swinger de Amsterdan
Fecha: 01/08/2024,
Categorías:
Sexo en Grupo
Tus Relatos
Autor: Pigty_Nai (Onlyfans), Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
... sentía cómo mi deseo aumentaba. Era una experiencia increíblemente intensa, estar rodeada de tanta pasión y deseo, dejándome llevar completamente.
Dave, viendo lo bien que lo estaba pasando, decidió unirse aún más a la acción. Se acercó a mí y empezó a tocar mi clítoris con sus dedos, mientras el chico rubio continuaba penetrándome. Todo era tan intenso que apenas podía contener mis gemidos. Mis sentidos estaban al borde del colapso, pero no quería que pararan. El chico negro empezó a mover su polla en mi boca de manera más rápida y profunda, mientras Dave intensificaba la presión en mi clítoris. Sentía cómo todo mi cuerpo se tensaba, preparándose para un orgasmo explosivo. Los gemidos y gritos de placer a nuestro alrededor se mezclaban con los míos. Finalmente, no pude contenerme y me corrí. Mi coño se contrajo con fuerza alrededor del chico rubio, mientras gritaba de placer con la polla del chico negro en mi boca. El rubio aceleró sus embestidas, dándome aún más placer. Dave sonreía con una mirada de triunfo y lujuria mientras me veía alcanzar el clímax.
Después de correrme, empecé a sentir cómo el chico negro se movía más rápido aún, sabía que estaba a punto de correrse. Seguí chupándola con muchísimas ganas, mirándolo a los ojos mientras gemía. Con un gruñido profundo, se dejó llevar y su semen caliente llenó mi boca. Tragué cada gota, disfrutando del sabor y de su enorme polla negra. Al ver esto, el chico rubio, que había estado follándome con pasión, se ...
... retiró y se puso de pie frente a mí. Sus ojos estaban llenos de deseo y me miraba con una intensidad que me excitaba aún más. Me arrodillé frente a él, mi boca aún saboreando el semen del chico negro. El rubio empezó a masturbarse rápidamente, y en cuestión de segundos, se corrió también. Su semen caliente salpicó mi cara y mis labios, y yo sonreí, disfrutando de la sensación y del momento.
Mientras esto pasaba, Dave hacía lo mismo con la chica a mi lado. Después de correrse en la cara de esa chica, se acercó a mí, me ayudó a ponerme de pie y me besó con muchas ganas, compartiendo conmigo el sabor de la mezcla de placeres. La noche había sido una mezcla de lujuria, deseo y locura, me sentía completamente viva, nunca había sentido esa sensación.
Finalmente, después de un tiempo que se sintió como una eternidad de placer y desenfreno, nos despedimos de los otros participantes y regresamos a la casa de Dave. Exhausta pero satisfecha, me acurruqué a su lado en la cama, sintiendo una conexión profunda y una gratitud infinita por haberme mostrado este mundo de placer y libertad. Sabía que nunca olvidaría esta experiencia y que siempre llevaría conmigo los recuerdos de esta increíble aventura en Ámsterdam. Esa noche dormí demasiado a gusto; a la mañana siguiente, Dave y yo tuvimos sexo después de levantarnos de la cama, y fue muy bueno también, pero no se comparaba a lo de aquel club.
Siempre recordaré a Dave, la verdad, que fue mi mejor encuentro con un cliente.