cumpleaños - Relatos Eróticos

cumpleaños

... actitud de aquellos capos era muy sospechosa pues parecían conocer su rutina diaria, no paso mucho tiempo cuando llego su esposo, Dario ya lo esperaba escondido y en el momento oportuno lo sometió con su arma, en el interior lo sentaron en una silla, lo amordazaron y le amarraron las manos y los pies, don Vicente le ordeno a ella llevarlo a donde tuvieran el dinero y las joyas, para evitar algún intento de valentía, le amarraron las manos atrás de la espalda, mientras subía la escalera el viejo no dejaba de mirar con morbo sus nalgas y sus piernas enfundadas en aquellas medias tan sensuales, saboreándose en cada movimiento de sus caderas, fueron al cuarto de las niñas y sacaron las cosas de valor, después  entraron a las demás recamaras, la última fue la recamara de los esposos, obviamente la cama estaba preparada con pétalos de rosa para más tarde, junto a ella se encontraba una botella de vino tinto, don Vicente sonrió con maldad y la tomo del brazo para dirigirse de nuevo a la sala, su esposo intentaba liberarse pero los amarres estaban muy fuertes y le fue imposible lograrlo, Liz descanso al saber terminado aquel suplicio, Dario metió las cosas en su mochila y se dispuso a huir con su padre, eso fue hasta oír la voz de su padre cuando se dio cuenta de su perverso plan.
—Oye tu bonita,  esta comida huele muy bien y la decoración de la casa está muy padre, se me hace una grosería haber interrumpido una celebración y lo justo  sería quedarse un rato a divertirse—
— (la ...

... piel de Liz se erizo y sintió un dolor agudo en el estómago) no por favor, ya solo váyanse y déjenos en paz,  no denunciaremos el robo, i tomaremos ninguna acción, solo queremos estar tranquilos—
— (la risa burlona de él la interrumpió) ¡jajajajajajaja! No seas estúpida, no estás en posición de darnos ordenes, sino obedeces a partir de ahora puede ser muy peligroso para tu marido (le hizo un gesto a dario y este empezó a golpearlo con brutalidad) —
— (ella quiso correr a ayudarlo pero don Vicente la sujeto del cabello haciéndola caer)¡NOOO! ¡Por favor déjelo!, está bien, está bien ¡obedeceré todas sus órdenes solo deténgase!—
— (Vicente hizo un gesto de nuevo y dario se detuvo, la desamarro y la miro) entonces obedece— 
Derrotada camino hacia la cocina y sin otra opción comenzó a atenderlos, ellos como dos cavernícolas comieron de una forma que provocaba asco, don Vicente le pidió una botella de vino y le ordeno sentarse a un lado de él, dudo por un instante pero prefirió obedecer, don Vicente no dejaba de ver el hermoso cuerpo de Liz, acerco su mano a las piernas de ella y quiso tocarlas, al notar sus intenciones se hizo a un lado, pero no pudo evitar ser tocada por aquellas toscas manos,  intento quitar aquella desesperada quitar su mano pero era demasiado fuerte para ella, su marido observo todo y se movía frenético en su lugar, al terminarse el vino don Vicente le pidió a dario poner música en su celular
— ahora nos vas a dar un pequeño show, ponte a bailar—
—está ...