en el bar - Relatos Eróticos

en el bar

... anotaba el tercero y todo era alegría y jubilo, todos se abrazaron y gritaron por la emoción, para ese momento la droga ya empezaba a hacer efecto en Estefany, por otro lado el mesero cumplía con su parte y se dedicó a emborrachar a Saúl, con el pasar de los minutos ella se sentía cada vez peor, le pidió ayuda a su novio para ir al baño y como estaba tan concentrado en el partido la ignoro, pude notar todo el enojo en su rostro, se levantó de su asiento y camino al baño, se iba tambaleando y sin querer en su camino tiro varias copas de otras mesas, todos la creían una borracha y no le dieron importancia, cuando por fin logro su objetivo, abrió la llave del lavabo para mojarse la cara, todo le daba vueltas y le costaba estar de pie, estuvo unos minutos frente al espejo, las demás chicas del lugar la veían y se burlaban de ella, quiso decirles algo pero no pudo hacerlo, su lengua se sentía entumida, intento volver a su mesa para hablar con Saúl, al verla salir yo ya la estaba esperando afuera, intento ir de regreso a su lugar, pero ya no pudo caminar, sus piernas no le respondían, estuvo a punto de caerse y la sujete, la tome por la cintura y la ayude a caminar, la lleve a la salida y pedí mi auto, al parecer la droga le afecto demasiado, no podía reaccionar ni pensar claramente, la subí y empecé a manejar hacia un hotel cercano, estaba muy desorientada, la droga hizo un efecto mayor en su cuerpo, estaba completamente a mi merced, cuando llegamos pague la habitación y metí mi ...

... carro, la saque del auto y la lleve a la recamara, la puse en la cama y empecé por desabrochar su blusa dejando sus pechos al descubiertos, su brasier de encaje blanco era muy sexy y la hacía ver muy cachonda, después le quite la falda y su calzoncito también era de encaje blanco, separe sus piernas y se podía ver a través de la tela como su pubis esta depilado por completo, después de muchos años de desearlo, ahora por fin, la tenía delante de mí indefensa, esta vez no podría rechazarme ni negarse a nada, se veía muy excitante con esa  ropa interior, llevaría al fin mi venganza, aquel chico al que desprecio por mujeriego ahora tomaría su preciada virginidad, me desnude y lleve mi pene erecto directo a su vagina, hice a un lado la tela y la penetre con fuerza, su himen se rasgó y un pequeño grito salió de su boca, sus lágrimas caían por sus mejillas, su rostro reflejaba  miedo y desconcierto, no entendía nada, en un momento estaba en el bar y en otro sentía un fuerte dolor en su entrepierna, su mirada perdida lo decía todo, no me importo y seguí penetrándola con todas mis fuerzas, intentaba gritar pero le tape la boca para evitar algún problema, estaba en la gloria, su vagina era muy estrecha y mi pene estaba siendo muy estimulado, debo reconocer no aguante mucho tiempo y me vine en su interior, había tenido un orgasmo muy intenso, pero no me iba a detener solo con eso, tome sus pechos con mis manos y comencé a chuparlos, en su rostro se notaba la angustia pero también algo de ...