Mi vecina me regaló su virginidad - Relatos Eróticos

Mi vecina me regaló su virginidad

Debo haber andado por los 32 años, casado y próximo a tener mi primer hijo.
Vivía en el segundo piso de un edificio alejado del Centro de la ciudad.
En el quinto piso vivía un matrimonio joven con una hija de 17 años. Era una hermosura, alta, delgada de buen culo y tetitas paraditas.
La veía todas las tardes llegar del colegio y me saludaba muy coqueta.Ella sabía que al subir la escalera le veía todo su culito porque usaba una falda cortito. Muchas veces terminé haciéndome una buena paja después de verla. Ella sabía lo que me provocaba.
Una tarde de sábado sentí que llamaban a la puerta y al abrir me encontré que era ella.
- buenas tardes vecina, disculpe que lo venga a molestar, me dijo -es que no me funciona el compu Y mis papás fueron a cenar a la casa de mis abuelos y llegarán tarde, yo me quedé porque tengo que hacer un trabajo para el colegio... Podría ir a ayudarme?
Valentina, que así se llamaba, andaba vestida con una minifalda cortita y una blusa escotada, que dejaba ver su sostén rosado con unas tetitas que lo llenaban totalmente.
Sentí la erección que me atacó de golpe, tan notoria que ella clavo sus ojos en mi paquete y sonrió con picardía.
Mi mujer dormía, así que cerré despacio la puerta y subo con ella a su departamento.
Iba caminando delante mío dejando que viera todo su culito y su calzon de encaje metido dentro de sus nalguitas perfectas.
Entramos a su departamento y tras cerrar la puerta con seguro, me dice:
-pase veci, tengo el compu en mi ...

... dormitorio porque aprovecho a trabajar de noche...
Me senté en el escritorio para comenzar a revisarlo y ver qué tenía. Ella se sentó en la cama con las piernas juntas, pero la Mimi las dejaba lucir bien arriba, casi al llegar a los calzones.
Comencé a manipula su compu hasta que logré que encendiera y pude ver que tenía abietas algunas páginas porno... Se sonrojó y bajo la cabeza con algo de vergüenza.
- no te pongas triste, le dije -tambien yo veo porno y me gusta ver niñas como tú... Eres muy hermosa. - ven, siéntate al lado mío y te mostraré unas páginas que te van a gustar.
No había mucho espacio para los dos en la banqueta así que la tomé de las caderas y la senté en una de mis piernas a lo que ella no se negó... A esa altura yo estaba a mil y con una tremenda erección. Debo decir que estoy muy bien dotado y así mi bulto se notaba completamente erecto.
Le mostré algunas páginas mientras iba notando su calentura.
Mi mami se posó en sus caderas y poco a poco la atraje hacia a mi hasta sentarla en mi paquete. Ella sintió mi verga y se estremeció 
Comencé a sacarle una pierna y subirla por el muslo. Ella no se negó, hasta que llegue a tocar su calzoncito al punto de sentir algo de su vagina. Está mojadisima y me paró el avance tomándome la muñeca.
Nos quedamos mirando y con la otra mano comencé a tocar una de sus tetas. Está vez se dejó hacer y me soltó la muñeca, entrecerró sus ojos mientras mi mano entraba con decision por debajo de los calzones y acariciando su ...