Mi vecina me regaló su virginidad
Fecha: 29/09/2024,
Categorías:
Infidelidad
Tus Relatos
Autor: Garabriel, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
... conchita con escasos y rizados bellos. Abrió lentamente las piernas para permitirme el avance a su tesoros más íntimos. Con un dedo comencé a acariciar su rajita, con mucha delicadeza, mientras la otra mano se daba al trabajo de abrir su blusa, bajarle el sostén y comenzar a lamer esos pezones rosaditos y duros por la calentura que la estaba dominando. Lleno su manito a mi bulto palpando su dureza.
- sacameli para que me lo chupes, le dije.
Bajo el cierre de mi pantalón y sacó mu verga tremendamente rígida. Su primera reacción fue de muedo de ver tamaño monstruo, pero su calentura pudo más y comenzó a introducirlo en su boquita sin pocas dificultades. Aproveché de empujar su cabeza hasta tenerlo casi entero adentro, hasta casi asfixiarse.
- desnúdate toda- le dije - ahora vas a gozar como esas putitas que vez en internet. Tendrás toda esta vergota en tu rica conchita.
Cuando la tuve desnuda frente a mi, me di cuenta de la hermosa presa que tendría ente mis manos. Me desnude completamente, la tomé en mis brazos y la deposité con delicadeza sobre su cama.
Decir que chupe, mamé y lengūetée ese hermoso cuerpo es poco decir, su cuerpo respondía con gemidos a mis avances. Le abrí las piernas y dejé que mi lengua hiciera el trabajo. Tuvo dos intensos orgasmos y sus jugos mojaba la cama y mi cara. No día esperar más.
Diez minutos me ...
... llevo poder meter dentro de su conchita la cabeza de mi ardiente verga y aproveché un nuevo orgasmo que la atacaba para introducir todo el gran trozo de carne hasta lo más profundo de su sexo. Gritó, se quejó, se revolcó pero yo mantuve la arremetida sin moverme... De a poco se fue el dolor dando paso al placer. La sentí acabar dos veces más antes de sentir que venia. Acabé con la fuerza de un volcán, cada chorro de semen que le inyectaba, le iba llenando la matriz hasta escaparse por los lados de su muy sabrosa vaginita.
Media desmayada como estaba, la di vueltas, le puse una almohada bajo su vientre dejando su hermoso culo a disposición de mi cruel herramienta. Con un dedo le unte del semen que aún salía de su conchita, para así lubricarle el estrecho hoyito. Le puse la punta de mi verga a la entrada del culo, la cogí cogí con ambas manos de sus caderas mientras me suplicaba que no se lo metiera, pero la calentura y las ganas de llenar con mi falo tan hermoso culo virgen pudo más y tras breves y firmes estocadas, logré meterlo hasta los testículos. Cómo goce a aquel hermoso cuerpo no se puede describir. Acabé llenando ese culo con gran cantidad de semen y me quedé encima de ella hasta que el miembro salió sólo
Esa noche follamos dos veces más y una vez acabé en su boquita.
A dos años de esto, seguimos follando como verdaderos animales