Deseos y realidades 2
Fecha: 16/10/2024,
Categorías:
Gays
Tus Relatos
Autor: andres, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
Después de mi lujurioso momento con Manuel, este se acabo tan pronto como comenzó, cuando el dejo de trabajar en nuestra casa.
Desesperado con mi libido por los cielos, continue buscando satisfacción para mis golosas nalgas de cualquier forma, ya fuera con cualquier objeto falico que pasara por mi imaginación, para ese tiempo me empece a afeitar los pelos de mi pene y alrededor de mi orificio fogoso, quedando mis redondas nalgas lozanas y dispuestas para cualquier macho que me quisiera poseerme.
Soy un chico andrógino que sin ser amanerado, tengo una apariencia con fuerte tendencia femenina.
En mi ultimo ano de bachillerato en el colegio conocí a Luis, un chico bello y musculoso con quien termine enamorado, para fortuna mía debido a que yo era muy buen estudiante, nuestro profesor nos puso a trabajar juntos para ayudarle a Luis a mejorar sus notas, yo estaba encantado y sin perder tiempo lo invite mi casa a estudiar, ya en mi cuarto no sabia como comportarme, me atreví todo nervioso cambiarme de ropa mas cómoda, dejándome una pequeña tanga que marcaba mis bellas nalgas, debajo de una pantalon corto que con solo agacharme se me metía entre las nalgas, dejándolas un poco por fuera y a la vista.
Terminamos de estudiar y Luis se fue a su casa, a la semana siguiente me propuso escaparnos del colegio y que nos fuéramos a la playa, cosa que emocionado estuve de acuerdo, llegamos a una playa solitaria por ser dia de semana, con un solo chiringuito donde se podia comprar ...
... almuerzos y bebidas, sin perder tiempo nos quedamos en calzoncillos y nos metimos al agua a nadar, después de un rato nos pusimos a competir quien podría aguantar mas tiempo debajo del agua, el se zambulló primero y enseguida sentí su mano sobre mis nalgas, me quede helado y sin poder rechazar su mano, salió después y me miro a los ojos, sin poder mirarlo me metí al agua aguantando mi respiración, no atreviéndome a dar el siguiente paso, tan pronto salí a superficie, le toco su turno, zambulléndose y tan pronto desaparecido me metió la mano entre mi pequeña tanga, manoseándome a su antojo, lleno de deseo abri las piernas y bajándome la tanga a las rodillas me entregue a sus caricias, siguió metiéndome un dedo en el ano y enseguida me agaro la mano y me la llevo a su calsonsillo, enseguida le saque su verga y ya la tenia dura, no la sentí tan grande como la de Manuel pero la sentí divina debajo del agua, lo masturbe un rato mientras el seguía con sus dedos explorando mi ano y fue cuando me dijo que quería metérmela, sin voluntad para negarme poseído por el deseo de ser penetrado, le di la espalda y abriéndome los cachetes de mis nalgas con las manos, guíe su polla hasta mi ano, por no tener lubricación le toco intentar varias veces hasta que con la ayuda del agua sentí la cabeza de su miembro traspasar mi ano y adentrarse dentro de mi, yo estaba tan poseído por el deseo que no me importo que el senor dueño del chiringuito nos estuviera mirando y excitado aun mas al ver que nos miraba ...