Relatos eróticos esposos cómplices cap 127 - Relatos Eróticos

Relatos eróticos esposos cómplices cap 127

CONTINUACIÓN 

Hola, somos Miguel y Elva y continuamos con nuestro relato iniciado en los cap 117/120 y 123 y hoy después de pasar por muchos episodios junto con mi padre viudo, estamos tratando de dejar un hijo para nuestra posteridad, para éso estoy preñando a una chica con su autorización y la de  mi esposa, por ser estéril.

Me despertaron el domingo algo tarde para tomar desayuno y sentado a la mesa vi servir los platos a mi esposa y a Teófila.

Tomando desayuno nadie hablaba y cuándo miramos a Teo, la veíamos sonrojada.

Papá : Teo, qué te ha parecido la capital ?

Teo : Muy bonito señor.

Papá : Tú sabes del trato que hicimos con tu padre ?

Teo : Si señor.

Papá : Aquí sólo vivimos los tres y vivimos felices y queremos que tú también lo seas junto con nosotros los 7 años que dura tu educación, por éso te pido que cualquier duda o comentario lo digas sin ningún reparo. 

Mañana mi hijo y yo nos vamos a trabajar y mi hija se hará cargo de ti. Te instalará en ése cuarto donde dormiste anoche y mi hijo dormirá contigo entre noches. Mañana también te alistas temprano para qué te matrículen en el colegio.

Teo : Está bien señor.

Y pasamos el domingo descansando y arreglando nuestras cosas para irnos a trabajar al día siguiente y Teo con mi señora acondicionaban su cuarto.

A la hora de dormir, Teo se despidió y nosotros nos fuimos a nuestro cuarto con mi papá.

Yo : Papá estará bien qué le hayas dicho todo éso ?

Papá : Hijo, es mejor dejar las ...

... cosas claras, ahora yá sabemos que ella está conciente que tú dormirás entre noches con ella, qué la voz fuerte la tengo yo y qué tendrá que obedecer a Elva.

Yo : Papá, yo prefiero dormir con mi mujer.

Elva : Anda nomás mi amor, gozala por qué sólo te la podrás cachar los 7 años qué estará con nosotros.

Yo : Y tú con quién dormirás?

Elva : Con mi otro marido. Ves así como yo disfruto de  2 vergas, tú también goza de nuestras 2 conchas.

Yo : Papá, tú no quieres dormir con ella ?

Papá : Me gustaría pero tú tienes qué hacerlo todos los días para asegurar que la vas a preñar y además en el trato con su papá sólo hablamos de tí.

Cómo en toda la conversación estuvimos acariciando a Elva, las vergas se nos habían parado y ella sin perdida de tiempo nos la chupaba alternando cada minuto.

Telepáticamente mi papá se tendió en medio de la cama mirando el techo y mi mujer se sentó encima empalandose la verga por la concha y luego yo por atrás se la clavé por completo por el culo, sin mucho esfuerzo por la práctica adquirida durante todo éste tiempo.

Sincronizamos nuestros movimientos y entre los gemidos silenciosos de los tres después de golpearnos duro, nos vaciamos dejándo nuestras leches muy dentro de mi mujer que nos agradeció con un beso, echándonos a dormir abrazados los tres.

 Al día siguiente al levantarme veo muy hacendosas a Teo y a mi mujer preparando el desayuno, qué después de tomarlo nos despedimos de ellas, yéndonos a trabajar.

Regresando a ...