1. La sobrina de Edelmiro


    Fecha: 18/12/2018, Categorías: Anal Autor: Quique., Fuente: CuentoRelatos

    ... desgracia!
    
    Abril, se resistía.
    
    -Estoy casada.
    
    -¿Estás capada?
    
    Por la puerta que había vuelto Edelmiro, entró en la sala de estar una rubia, delgada, de ojos azules y larga melena. Era muy alta y tendría unos treinta años. Vestía con lencería roja tremendamente erótica, y es que llevaba puesto el sujetador, el liguero y las medias, pero no llevaba bragas. Se veía su coño totalmente depilado. Calzaba zapatos de tacón de aguja de color rojo y llevaba una fusta en la mano derecha. Le volvió a preguntar a Abril:
    
    -¿Estás capada?!
    
    Abril, al verla, se persignó, y exclamó:
    
    -¡Con Satanás hemos topado!
    
    -¡Con la fusta de Satanilla os vais a topar si no os besáis. Te hicimos una pregunta: ¿Estás capada?
    
    -No.
    
    Le largó con la fusta en las dos piernas:
    
    -¡¡Plas, plas!!
    
    A Abril le dolió.
    
    -¡Ay!
    
    Satanilla, con cara de mala hostia, le dijo:
    
    -¡Besa e esa guarra o te lleno de cardenales!
    
    -Cuando salga de aquí os voy a poner una denuncia por abuso que os vais a cagar.
    
    Edelmiro, le dijo:
    
    -Si salís. ¡Cómo odió a todas y todos los testigos de Jehová! ¡¡Farsantes!!
    
    -Los testigos de Jehová no odiamos a nadie. Jesús...
    
    Sartanilla, ya se hartara.
    
    -Pégales un tiro si no se besan, Miro.
    
    -Es que una es mi sobrina. Se lo pego a la pelirroja.
    
    -Vale, así tu sobrina me quita el trabajo de limpiar la sangre.
    
    Edelmiro apuntó a Abril a la cabeza, y le dijo a su sobrina:
    
    -Apártate de su lado que va a salpicar.
    
    ¡Ni Jehová ni hostias! ...
    ... Abril, le dijo a Martina:
    
    -Bésame, bésame que están locos.
    
    Las jóvenes se pusieron de lado en el tresillo y se besaron. Se daban pequeños picos con los labios. Satanilla le dio con la fusta en el culo a las dos.
    
    -¡¡Plas y plas!!
    
    -¡Con lengua! ¡¡Y no paréis hasta que yo os lo diga!!
    
    Se rozaron las lenguas, después se las chuparon. De besarse con los ojos abiertos pasaron a besarse con los ojos cerrados. A los cinco o seis minutos ya estaban coloradas, mojadas y luchando para no gemir, y es que cuando a una se le abría y se le cerraba el coño, a la otra se le abría y se le cerraba el ojete, y viceversa. Viendo que ya estaban calentitas, Satanilla, les ordenó:
    
    -¡En pie! -se pusieron en pie- Tú, pelirroja, mete una mano dentro de sus bragas y masturba a tu hermana.
    
    Abril le levantó el vestido a su hermana de leche, le metió la mano dentro de las bragas y se encontró con una piscina. Martina, al sentir los dos dedos de la mano de Abril dentro del coño cerró los ojos y se le escapó un pequeño gemido... Volvió a abrir los ojos y miró a su hermana de leche mientras ésta la masturbaba. Se morían por volver a besarse. Satanilla, tenía otros planes.
    
    -¡Bájale las bragas y cómele el coño, pelirroja!
    
    Abril, le dijo:
    
    -No sé hacer eso.
    
    -Tú lame su coño de abajo arriba que ya verás cómo al final se corre.
    
    Abril le bajó las bragas a Martina y después le lamió de abajo arriba el coño encharcado.
    
    Edelmiro, sacó la verga, un tremendo cipote y se puso a ...
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