Relatos eróticos esposos cómplices cap 156 - Relatos Eróticos

Relatos eróticos esposos cómplices cap 156

... los tres dimos inicio a nuestra reunión con nuestras respectivas cervezas.

Estando mareado a mitad de la reunión, mi compadre espero estar a sólas conmigo.

Compadre : Compadre, quería presentarle mi disculpa por lo ocurrido la semana pasada.

Yo : Qué pasó compadre, cuénteme.

Compadre : Estaba orinando en su baño, cuando la comadre abrió la cortina y me vió.  Fué sin querer compadre usted discúlpeme.

Yo : No sé preocupe compadre, Rosa me lo contó asustada por sus 30 Cms.

Mi compadre río, diciéndo.

Compadre : No compadre, es normal, no es para tanto. La comadre estuvo mareada.

Yo : Compadre, usted disculpe una pregunta. Qué hace ahora sin la comadre.

Compadre : Sigo pensando en ella, pero a veces tengo ganas, pero me aguanto pensando en ella.

En éso llegó mi mujer a la sala y abrazándola le dije, que el compadre había pedido disculpas por lo de la semana pasada.

Compadre : Si comadre discúlpeme no fué mi intención.

Rosa : No sé preocupe compadre, la culpa fué mía por no preguntar antes, pero yá pasó.

Tomamos una hora más y después nos despedimos.

En la cama con mi mujer.

Yo : Vez mujer, dice que la tiene normal. Has visto mal.

Rosa : Amor, no creo que me haya equivocado.

La curiosidad de saber la verdad me ponía caliente y no sabía cómo hacer.

Yo : Amor, dice que está súper arrecho y en cualquier momento vá a pecar.
Si te agarra a tí te destroza por qué tiene más de un año que no cacha mujer.

Rosa : Y por qué me ...

... agarraría a mi. Yo no tengo nada que ver con éso.

Yo : Dime, no te gustaría cacharlo, mira qué debe estar bien dura, cómo a ti te gusta.

Rosa : Tú estás loco, a pesar qué sí me gustaría verla bien para salir de mi duda.

Yo : No te gustaría aunque sea hacerle una paja.

Rosa : No mi amor, sólo quisiera verla de cerca.

Yo : No lo harías por la comadre.

Rosa : No mi amor, hay tantas mujeres para que pueda desfogar.

Yo : Amor cuéntame al oido imaginando que te lo cachas

Rosa : En verdad, tú quieres que el compadre me caché ?

Yo : No sé por qué, pero me gustaría verte gozar con una verga así de dura y de grande cómo tú dices y con mi compadre, qué está aguantado hace más de un año y es de confianza.
En tú vida volverás a encontrar a un hombre con ése tiempo de aguante, sólo que sea un chico virgen. 

Rosa : No mi amor, gracias, sólo puedo verla.

Yo : La semana que viene está bien ?

Rosa : Pero dile cuándo estemos bien tomados.

Encima de mi mujer con mi verga dura metida hasta el fondo, ella, me apretaba con sus piernotas por mi espalda mientras se lo movía escuchando lo sensual que me relataba al detalle la forma cómo el compadre la estaba haciendo gritar. 

Llegó un momento en qué mi mujer dejo de hablar, para empezar a moverse desenfrenadamente y a su ritmo en 5 minutos nos vacíamos.

Ésa semana estuvimos nerviosos sin tocar el tema hasta el sábado al mediodía.

Rosa : De todas maneras hablarás con el compadre ?

Yo : Así hemos ...