Un inicio incestuoso y peculiar con mi tía - Relatos Eróticos

Un inicio incestuoso y peculiar con mi tía

Esto sucede poco tiempo después de mi anterior relató:
https://relatos-eroticos-club-x.com/132424_como-inicio-mi-fetiche
Había comenzado el verano y yo me disponía a seguir experimentando con todo tipo de experiencias sexuales, y para mi suerte en esos días nos visitó una tía.
Mi tía en ese entonces era una mujer de 50 años. Siempre había sido la oveja negra de la familia, ya qué según contaban varios familiares ella había participado en eventos swingers, tríos, entre otras cosas. Su mala fama había crecido con su reciente divorcio. Por otra parte siempre fue una mujer muy hermosa, pese a ser la mayor de sus hermanos se veía décadas más joven qué ellos, con unos pechos firmes y bastantes grandes, un abdomen plano, y unas piernas y glúteos bien ejercitados gracias a su afición a la caminata, y a el rapel.
Apenas llegó a la casa mis padres la confrontaron para ponerlo todo tipo de reglas y condiciones qué debía de cumplir. 
Pasaron los días, y yo no había visto a la depravada qué según contaban todos, solo veía una mujer con unas creencias más relajadas a las del resto de mi ortodoxa familia. Me terminé llevando bastante bien con ella, incluso era como verme a mi mismo ya qué ella había pasado por las mismas reglas estrictas de mi familia, y comprendía su rebeldía. 
Un par de días después una vez salieron todos los adultos de compras, yo llame a un amigo (si leyeron mis relatos anteriores sabrán que soy bisexual), una vez llegó me comenzó a coger. Fue tanta la calentura ...

... qué ni siquiera cerré la puerta (detalle importante). Ahí estaba yo recibiendo la verga de mi amigo, él cuál me cogia cómo desesperado. Hasta que se escucho un no mames proveniente de mi tía. 
Al parecer por dejar la puerta abierta ella regreso, escuchó el ruido y fue de curiosa a ver sin hacer ruido. 
Al verla en la entrada del cuarto me puso pálido, mi amigo salió corriendo presa del pánico (les recuerdo que teníamos 16 años). 
Me quede asustado esperando a qué mi tía dijera alguna frase o algo, pero sólo se quedó callada. El resto del día me la pase con algo de vergüenza, y preocupación de qué les contará a mis padres, pero no fue así. 
Un día después de lo qué paso mientras estábamos en el patio me dijo con un tono de curiosidad 
- qué pasó con tu noviecito, sé notó qué te estaba haciendo disfrutar bastante. 
Yo solo me sentí con vergüenza, pero al ver qué no me estaba juzgando le termine contando todo, ella soló me escuchó con bastante calma. Incluso me comenzó a darme varios consejos sobre el sexo anal e hizo qué entendiera más mi propia bisexualidad, y mis fetiches. 
Después de eso hubo más complicidad entre mi tía y yo, nos hicimos muy cercanos al grado qué nos contábamos todo. Otra cosa qué también inició fue el darme gusto con mis fetiches, pues se volvió habitual qué por las noches me dejara alguna prenda sucia qué uso durante el día, ya sea un calzón, calcetín, pantalón entre otras cosas. No sabia porque lo hacía pero yo disfrute bastante sus regalos.
Paso ...