No sé qué hacer 3 - Relatos Eróticos

No sé qué hacer 3

Un día que estaba en casa después de la escuela, veía una película en la tele de la casa. Tavo llegó de la escuela, de nuevo sólo, al entrar a la sala se me quedó viendo unos segundos con odio. Yo súper cómoda con mi blusa larga y braguitas, comiendo palomitas le dije:
C: Qué quieres? 
G: Por tu puta culpa, por andar de chismosa Jairo ya no quiere venir a mi casa, casi no me habla.
C: Y te pone triste que tu marica amigo ya no te deja chuparsela? 
La cara de Tavo se puso roja de furia, se fue enojado a su cuarto, yo feliz disfrutaba la tarde.
Sin saber en qué momento me quedé dormida recostada en el sillón boca abajo. Me sentía agitada, entre sueños tenía sensaciones raras, un poco excitantes, ricas, era difícil despertar ya que tengo el sueño muy pesado. Cuando abrí los ojos escuchaba jadeos y sentia algo invadiendo mi vagina. La boca de Tavo cerca de mi oído y su voz agitada me hicieron reaccionar:
G: Hasta que despiertas putita, que sueño tan profundo tienes.
C: ¿Qué me haces idiota?
G: Como ya no tengo un amigo con quién experimentar y nuestro papi te prefiere, ya no me visita por las noches, ahora me voy a desquitar contigo.
Me quise levantar para huir, pero el peso de Tavo no me dejaba moverme.
C: Qué asco, sacamela, no hagas esto! Le voy a decir a mi papi!!!!
G: yo le voy a decir que tú te me ofreciste, que me provocaste porque eres una putita busca verga.
C: eso es mentira!! No te creera!
G: ya lo veremos... Ahora entiendo por qué le encantas tanto, ...

... aaahh yo también quisiera cogerte diario... Mmmm que rica estás hermanita, apretadita como la primera vez que te partimos, me gusto mucho sabes, fue un deleite hacerte llorar mientras te cogiamos, me vine tan rico.
Después de un rato de tenerme recibiendo su verga empecé a gemir, era inevitable, lo metía muy rico (claro que no tanto como mi papi, pero pues igual era rico). 
Me jaló, le cantando se un poco, poniendose de rodillas y a mi en cuatro. Metiendome el pulgar en mi culito, me lo llenaba de saliva sin dejar de penetrarme. Con su otra mano me jalaba del cabello.
G: No que te daba asco, si ya estás gimiendo como perra, eres bien puta, me encanta cogerte. Mientras Jairo se niegue a venir o verme, me voy a desquitar contigo!.
De repente me la sacó y de golpe me la metió en mi culito, lo que me hizo soltar un fuerte grito, al mismo tiempo que intentando voltear, (sin éxito, porque me tenía bien sujeta del cabello) con una mano intentaba empujarlo, el me tomó del brazo para mejorar su agarre y penetrarme duro, muy fuerte, sin piedad.
C: aahhhh ahhh ayyyy aahhhh noooo!!! Aaahhh duele, para para, mi colita me duele, aaahhh aaauuuhhh...
G: Mmmm... Que rico culito, aahhhh que bien que aguantas esto. Con razón papi te prefiere...
C: cállate tarado! Papi ya no me toca, hace días que no me hace nada!!!
G: Que raro, quién sabe con quién estará descargando sus ganas...
De pronto Tavo cambió de mi culo a mi vagina de golpe.
C: aahhhh yaaa tarado, qué tanto me haces!!!
G: están ...