1. No sé qué hacer 3


    Fecha: 04/02/2025, Categorías: No Consentido Tus Relatos Autor: Anónimo, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X

    ... muy ricos tus agujeros, hay que aprovecharlos al máximo...
    Volviendo a mi culo con fuertes embestidas me llenó de semen. Después de descargarse me dió un suave beso en ya espalda y me dijo:
    G: gracias putita, que rico me deslechas, cuando me vuelvan a dar ganas te busco.
    Me la sacó y se fue a su cuarto. Yo me derrumbé boca abajo, furiosa por cómo me había usado ese idiota, mi culito palpitaba y lo sentía escurrir. No me pude levantar en un rato, cuando pude me fui a bañar. Después de bañarme me fui a mi cuarto a secar mi cabello. Llegó la noche e intenté dormir. Mañana le diría a papi lo que me hizo Gustavo para que le volviera a dar su merecido.
    Durante la noche comencé a escuchar una voz que intentaba despertarme. Cuando intenté moverme no pude. Estaba acostada de lado, me tenían sujeta por la cintura, pegada a su pecho y con la otra mano tapaba mi boca, escuché que me decía:
    P: Soy papi nena, no hagas ruido.
    Me emocioné al escucharlo, quise girarme para abrazarlo, pero no me dejó. Lo sentir bajar mis bragas, poner sus dedos frotando mi ano, me dijo:
    P: Ya me dijo Tavo que andas de puta buscona...
    C: No papi, el me tomó sin mi permiso, yo dormía y él....
    P: Cállate, no tienes que inventar excusas. Ya me dijo que tú le contaste que hace mucho no te cojo, que por eso necesitabas una verga.
    C: No papi, yo no...
    Me tapó la boca al mismo tiempo que me enterraba bruscamente su enorme verga. Me sentí sofocada por el dolor, papi comenzó a moverse en bruscas ...
    ... envestidas. 
    P: Te había dejado descansar para no abrumarte, pero de ahora en adelante te voy a dar tanta verga que no te van a quedar ganas de probar otra, mucho menos de andar pidiendo.
    Lágrimas caían de mis ojos, papi no me había preparado para recibirlo, nunca me había dado tan fuerte, me cogía enojado y me dolía muchísimo. 
    Yo me quería quitar, liberar, el dolor no bajaba, mi culito me ardía cada vez más. Papi mordía mi cuello, mis hombros, mi orejita, seguía penetrandome como bestia sin piedad, me decía:
    P: Que delicia tratarte como la puta que eres, esto te va pasar cada vez que andes de coqueta, de ofrecida. ¿Entendiste? 
    Me destapó la boca y entre lágrimas contesté:
    C: Sí papi, sólo soy tuya... Pero yo no me le ofrecí a Tavo, el me agarro dormida en la sala...
    Me retorció un pezón y yo me mordí los labios para no gritar.
    P: Entonces cómo supo que yo te había dado verga hace días?
    Sus embestidas se volvieron más crudas y bestiales.
    C: Yo le dije, porque me reclamó que a el ya no lo vas a ver, dijo que me prefiere y por eso ya no le das a él. Le dije que yo no tenía la culpa, que a mí tampoco me tocabas...
    Se me quebró la voz y ya no pude seguir, sollozaba sintiendo como me perforaba papi el ano.
    Siguió su castigo con la misma intensidad hasta que lo sentí venirse. Sin sacarmela continúo hablando:
    P: Entonces Tavo me mintió? Tú no te le ofreciste.
    Yo no podía hablar, me sentía muy cansada.
    Papi me paso las manos para agarrar mis pechos y senti como su pene se ...