Mi amigo, nuestro amigo y mi debilidad - Relatos Eróticos

Mi amigo, nuestro amigo y mi debilidad

Cómo era de esperarse, cada vez que Erick quería sexo ahí estaba yo. Todo era casual, solo me avisaba que llegaría a la casa para yo arreglarme par el. Esa tarde casi entrada la noche, me marco para avisarme que iría; así que puse manos a la obra y después de un buen baño, depile el poco bello que me queda, dejando mis piernas y mi trasero, tan suave como piel de bebé. Una vez afuera escogí un conjunto que el me regaló, una tanga negra con algunos detalles en rosa, liguero con los mismos colores, un bra que hacía juego y medias rosas. Me mire al espejo y me guste mucho. Mi cola se veía hermosa, esperando ser utilizada por mi macho.
Baje a esperarlo con un pans, y no tardo mucho en llegar. Sin embargo no venía solo, cosa que me sorprendió, era un amigo de hacia muchos años habíamos dejado de ver.
Después de saludarnos, Juan se fue al baño y Erick no perdió la oportunidad par bajarme el pans, morbosearme, apretar mis nalgas y manosear mi culo; cosa que me puso caliente.
Erick sirvió algunos tragos y mientras escuchábamos música y platicábamos de todo y nada con Juan, llegamos a las pláticas morbosas. 
Yo trataba de no mostrar mucho emoción, cuando se hablaba de las cogidas que Juan relataba. Erick por su parte solo reía y complementaba las pláticas volteando a verme, como su cómplice. 
Después de algunos tragos más, me senti mareado y muy caliente. La verdad es que a Juan se le notaba un buen bulto en su entrepierna y mi imaginación volaba. Después de algunos tragos más ...

... Juan salió por más bebidas. Erick aprovecho el momento para sacarme el pans y después de morbosearme, saco su verga ya con una erección, cosa que agradecí metiendo su hermosa verga en mi boca, recorrí cada centímetro de ella, queriendo tragar la toda, chupe con gusto esa cabeza, mientras Erick bufaba. Todo fue tan rápido, poniéndome en cuatro sobre el sillón comenzó a darme con fuerza, mi culo trago su verga, permitiendo que entrara y saliera las veces que fueran necesarias, Erick me trataba como una puta, su puta, mi coño agradecía la entrada de su polla y sin mas que esperar una descarga de leche lleno mis entrañas...mmm rico papi, dame toda tu leche, preñame...le decía yo; mientras el se estremecía hasta terminar completamente vacío.
Inmediatamente se subió el pantalón, mientras yo iba al baño a evacuar toda esa leche. Justo a tiempo ya que Juan tocaba a la puerta.
Tarde algo en salir pero una vez afuera seguido platicando de lo mismo, fue el momento tal vez pero ahora Juan se sobaba la entrepierna dejando ver el tamaño de su verga, nada despreciable.
De pronto un llamada para Erick y sin dudarlo, se despide y nos dice que regresará más tarde. 
Salgo a despedirlo y cuando entro, Juan me dice:
"Que bonita ropa interior traes puesta"
Me quedo frío y solo sonrió, no se que decir.
"Me dejas hechar un ojo, quiero verte solo con esa ropa"...
Me quedo helado...y Juan aprovecha para manosearse la entrepierna mostrándome el tamaño de verga.
Yo me siento confundido pero ...