AGUJEROS SIN DESPERDICIO
Fecha: 26/05/2025,
Categorías:
Hetero
Tus Relatos
Autor: CARAMELO, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
Luego de más o menos seis meses del rescate de la fábrica de aceite, en ese pequeño pueblo que tantas satisfacciones me brindó, apareció otra de las viejas estructuras que la empresa original de ingenieros y constructores había desarrollado en el interior del país, también en la pampa y en un pequeño pueblo, habitado, en su mayoría, por los chacareros de la zona, que en este caso no eran solamente gringos, sino también españoles y algunos turcos.
De entrada, nomás, sabía que tendría que estar unos catorce meses, así que resolví, junto con la empresa para la que trabajo, que tratara de alquilar alguna pequeña vivienda que haya quedada desocupada y que conste con los muebles elementales. Y así fue: una pequeña casita que había quedado desocupada, pues el joven matrimonio que la habitaba resolvió mudarse a la ciudad, fundamentalmente por razones laborales. Los padres, que vivían al lado, y que tenían otra hija “para casar”, como se usaba en los pueblos, me la ofrecieron en cuanto se enteraron que andaba buscando algo así.
Me preguntaron si había pensado en tener alguien para mantener la limpieza o me iba a dedicar yo. Por supuesto, les dije que prefería contratar alguien que lo hiciera, por lo cual me recomendaron a la señora que atendía a sus hijos hasta que se mudaron. Me garantizaron que es muy honesta e incapaz de meter mano en algo que no correspondiera, por lo cual acepté inmediatamente. Arreglamos que vendría lunes, miércoles y viernes, cuatro horas a la mañana, y ...
... se ocuparía del orden y la limpieza.
Cuando vino…, pues…, lo de la honestidad pasó a segundo plano; es una petisita regordeta, de cabello castaño, inmensos ojos color vino, hermoso rostro y… tetas y culo de exposición. Tendría 1, 65 de altura, más o menos, unos 40 años, con todas las virtudes de una mujer a los cuarenta, una sonrisa de “aceptación, complacencia y estoy para todo”, según mi libidinosa opinión, más tetas y culo de primer orden, en lo que me parece de total disposición. Por lo menos, creí que así me lo decía su sonrisa cuando nos conocimos.
Debo reconocer que en cuanto llegaba, a las 8 de la mañana, la pija se me ponía al palo inmediatamente…, pero Amanda, tal como se llama, no me daba demasiada bola. No me ignoraba, pero su trato era bastante neutro…, digamos, sin oportunidad de “confraternizar”.
Dos semanas pasaron en las cuales intenté acercarme amigablemente, pero Amanda, muy cordial, no me daba demasiada pelota.
Amanda me calentaba demasiado, aunque por suerte estaba muy poco en la casa luego que ella llegara, pues me iba a trabajar. Pero, así y todo, su forma de ser, su disposición, era tan amable y simpática, que no podía creer que mis reclamos no tuvieran respuesta…
Como siempre, cuando no hay puerta…, busco la ventana. Con toda “maldad” inventé algo de total perversión…, bueno, eso creía…, esperando que Amanda reaccionara.
Como era pleno verano y hacía mucho calor, una mañana, en la cual no me había levantado…, esperando que venga, hasta ...