Del odio a una noche de pasion desemfrenada - Relatos Eróticos

Del odio a una noche de pasion desemfrenada

... a mi escritorio, era muy hábil con la computadora, abrió sus piernas de manera que se podía apreciar que tenía un buen paquete, su camisa tenía dos botones sueltos que exhibía sus ricos pectorales, note que iba acercando cada vez más hasta que puso su mano en el respaldo de mi silla, terminando mi labor me pone la mano en la espalda y la desliza hasta el borde la pantalón, me calentó su roce pero trate de que no se notara, tenía una actitud diferente y muy caballerosa en pocas palabras todo un amor. Por fin terminamos el trabajo ahora si puedes hablar conmigo Yo: dime lo que me quieres decir Eduardo: no aquí, quiero llevarte a un lugar especial Yo: de que hablas Eduardo: por favor, necesito hacerlo para cambiar la imagen mala que tienes de mi Yo: ok Me llevo a un lugar de la ciudad que nunca había visitados porque una zona de casa de lujo y tiene una vista a la ciudad fenomenal, al inicio no sabía porque lo dejaban entrara tan fácilmente, después me dice que su casa queda en ese residencia, nos sentamos en una parque recreativo sensacional Eduardo: debo disculparme siempre mostrando tan amigable y yo todo un patán Yo: un patán nooo un bestia y que me perdone la bestia por la comparación Eduardo: si eso y todo lo que tú quieras decirme lo acepto, es más si deseas golpearme en este momento para pagar mi culpa lo aceptare Yo: y ese cambio, este sonámbulo o algo te pico jajaja Eduardo: nunca te preguntaste porque era así solo contigo Yo: no Eduardo: si después de lo que voy a ...

... decirte me quieres golpear lo puedes hacer y lo comprendo Yo: otra vez con los golpes, tengo cara de boxeador o que… Eduardo: lo que sucede es que siempre me gustaste desde el primer día que llegue a la oficina y quise negar lo que sentía tratándote mal Yo: no seas mentiroso (dudando de lo que me decía), en broma le digo…me agarro mi paquete y le bésame aquí y te creo No termine de decirle cuando se me lanza encima y me empieza a besar mi verga de la manera más sensual que nuca lo había experimentado, en ese momento no puede negarme, era delicioso lo que me había sentir ese hombre tan bello con sus ricos labios. Lo levanto y le doy un beso apasionado era tan fácil si lo que sentías lo hubieras expresado porque tu me encantas, se sonríe y me dice quiero que seas mío esta noche, le respondo esta noche y todas las noches que desees mi chocolatazo, nos fuimos a su hermosa casa directo a su cuarto nos desnudamos rápidamente me llevo a su cama nos besamos y acariciamos, me dice que tenia la fantasía de hacerlos en la tina, le respondo donde y como tu quieras, nos fuimos al baño y mientras se llena de agua la tina me inicia una rica mamada que boca mas habilidosas se metía el pene hasta el fondo me hacia sentir delicioso, me da la vuelta y comienza a darme un besos negro como pocos saben dármelo, nos metimos en la ducha a besarnos como locas el nivel de lujuria estaba ala máximo, cada centímetro de mi hombre era para disfrútalos, tenía un pene de 20 cm. grueso y con muchas venas, un ...