Mi regalo negro de 18 años en el colegio - Relatos Eróticos

Mi regalo negro de 18 años en el colegio

... movimientos se volvieron más intensos y profundos. Jamie se aferró a él, sus uñas clavándose en su espalda mientras el placer la consumía. "Más fuerte," susurró, queriendo más.

Marcus obedeció, sus embestidas se volvieron frenéticas y desesperadas. Jamie sintió una oleada de éxtasis mientras su cuerpo alcanzaba el clímax, sus músculos internos se contraían alrededor de él. Con un gemido profundo, Marcus llegó al orgasmo, su cuerpo temblando de placer.

Se quedaron abrazados durante un largo rato, sus corazones latiendo al unísono. Marcus besó la frente de Jamie y susurró: "Eres increíble, Jamie. Gracias por compartir esto conmigo."

Jamie sonrió, sintiéndose más feliz y completa que nunca. "Gracias a ti, Marcus. Ha sido perfecto."

Desde ese día, Jamie y Marcus continuaron explorando su relación, descubriendo juntos el placer y el amor. Jamie se sentía más segura y confiada que nunca, y Marcus la adoraba por quien era, sin juzgar ni cuestionar su identidad. Juntos, construyeron una conexión profunda y significativa, basada en el respeto, el deseo y el amor incondicional.

Claro, aquí tienes la segunda parte de la historia, donde la relación entre Jamie y Marcus se fortalece y se vuelve más profunda:

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Los meses pasaron, y la relación entre Jamie y Marcus se volvió cada vez más fuerte y significativa. Pasaban la mayor parte de su tiempo libre juntos, explorando la ciudad, disfrutando de la playa y, sobre todo, disfrutando de la compañía del otro. La ...

... química entre ellos era innegable, y su conexión se profundizó con cada experiencia compartida.

Una noche, mientras cenaban en un pequeño restaurante a la luz de las velas, Marcus tomó la mano de Jamie y la miró a los ojos. "Jamie, quiero que sepas que estoy enamorado de ti. Eres la persona más increíble que he conocido, y no quiero pasar ni un día más de mi vida sin ti."

Jamie sintió una oleada de emoción y sus ojos se llenaron de lágrimas. "Yo también te amo, Marcus. Eres mi roca, mi mejor amigo y mi amante. No puedo imaginar mi vida sin ti."

Después de la cena, regresaron al apartamento de Marcus, donde la pasión entre ellos volvió a encenderse. Esta vez, sin embargo, había una intensidad diferente, una profundidad emocional que hacía que cada caricia y cada beso fueran aún más significativos.

Marcus desvistió a Jamie lentamente, besando cada parte de su cuerpo como si fuera la primera vez. Jamie se sentía adorada y deseada, su confianza en sí misma creciendo con cada toque. "Eres tan hermosa, Jamie," susurró Marcus, su voz llena de admiración. "Cada centímetro de ti es perfecto."

Jamie respondió desvistiéndolo a él, sus manos recorriendo sus músculos definidos y su piel suave. "Y tú eres fuerte y seguro," dijo, besando su pecho. "Me haces sentir segura y amada."

Se movieron hacia la cama, donde Marcus comenzó a explorar el cuerpo de Jamie con una dedicación y una paciencia que la hicieron sentir como si fuera la única mujer en el mundo para él. Sus dedos y su ...