1. La noche en una reunión que cambió todo


    Fecha: 04/07/2025, Categorías: Confesiones Tus Relatos Autor: Anónimo, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X


    La noche en una reunión que todo cambió
    
    Todo empezó como cualquier sábado. Sin pretensiones.
    
    Invitamos a Mario, Marta y ellos nos comentaron que ya tenían plan con in amigo , pero que si no había problema lo invitaban , a lo que contestamos que con gusto , un tipo que no conocíamos, Carlos, amigo de ellos. Adriana y yo teníamos ganas de hacer algo distinto, relajado, en casa. Había cervezas, vino tinto para los invitados principalmente porque nosotros prácticamente no tomamos y el dominó. Un plan tranquilo.
    
    En las primeras rondas de juego estábamos todos tranquilos, Las bromas de siempre y los castigos por perder realizar retos simples con comida y en algunos momentos algo ridículo , Conversaciones cruzadas. Pero fue Mario  quien lanzó la idea de hacer algo más “divertido”: jugar a retos y castigos para el que perdiera  más fuertes , Entre risas, todos accedimos, Adriana un poco mas renuente, pero después de unos minutos con su forma tan natural y coqueta, dijo:
    
    —Pero si yo juego, Marta también. No se vale dejarme sola en esto.
    
    Y ahí todo comenzó a girar.
    
    Los primeros retos fueron simples. Chistes tontos, tomar de más, o decir algo picante o contestar preguntas indiscretas principalmente séxuales, Después vino lo de quitarse prendas. Una copa tras otra, la ropa empezó a caer. Lo que empezó como una dinámica inocente fue volviéndose más atrevido.
    
    Carlos perdió una mano. Y fue mi esposa la que propuso el castigo:
    
    —Que se ponga ropa mía.
    
    Todos reímos. ...
    ... Era un tipo mediano, simpático, bien parecido y aunque no lo conocíamos bien, no dudó. Subió al baño con una tanga negra y un sostén ajustado. Cuando salió, las carcajadas no se hicieron esperar. Pero lo que me sorprendió fue cómo Adriana lo miró. No fue una mirada cualquiera. Bajó los ojos directo a su entrepierna, donde la tanga no ocultaba mucho. Y se quedó ahí, un segundo de más.
    
    Yo noté esa mirada. Ellos también Y también noté que… me gustó. Me calentó.
    
    Los castigos fueron subiendo. Todos perdiendo prendas Adriana perdió una mano . Se levantó sin dudar y se quitó la tanga que era lo último que tenía de ropa.
    
    Su cuerpo quedó expuesto bajo la luz cálida del comedor. Todos ya estábamos casi desnudos, la ropa regada en las sillas o el piso. Respirábamos fuerte, con los miembros tensos y húmedos, completamente excitados.
    
    Y entonces, sucedió algo que aún hoy, cuando lo recuerdo, me prende como pocas cosas.
    
    Adriana perdió otra mano porque ellos se ayudaban para que ella perdiera , castigo alinear las sillas y ella completamente desnuda, se acercó al centro de la sala y empezó a bailar. No pidió música. Se movía como si la llevara por dentro. Su cuerpo se deslizaba con una sensualidad natural, sin esfuerzo. Las sombras de la luz marcaban las curvas de su espalda, el movimiento de sus pechos, la redondez de sus caderas.
    
    Giró despacio, se dio vuelta y se agachó tocando la punta de sus pies, con la espalda recta, y al hacerlo, abrió un poco las piernas. Esa imagen ...
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