Mudanza y placer 2 - Relatos Eróticos

Mudanza y placer 2

... me obligó a hacerlo, me daba bastante asco hasta que comencé a jugar con mi lengua en su ano entonces la excitación del macho hacía que aquel agujero casi se abriese esperado mi lengua y dado que su excitación iba al aumento me contagiaba a mí dándolo todo por darle placer al señor. 

Cambiamos de tercio y directamente me ofrecieron el culo del invitado que comencé a comer ya sin ningún tapujo alimentándome de aquel agujero como si toda la vida lo hubiese hecho así hasta el cambio de tercio en el que pude comerme aquella polla de 16 centímetros y algo más gruesa que la mía comiendo sus pelotas y sintiendo como destinaba aquel líquido preseminal y como sujetando mi cabeza me la metía hasta los huevos haciéndome sentir arcadas. 

Fuimos a la cama dos tres y después de lubricarme mí esfínter con vaselina tumbado de medio lado y levantándome una pierna sentí como aquello comenzó a abrirse paso era la polla de más joven así que para empezar no estaba mal ya que abriría el camino para la otra. 

El señor hizo lo propio con mi enculador y se la metió sin demasiada dificultad ya que este enseguida comenzó a darme más duro, yo jadeaba musitaba sentía cada golpe de riñón de aquel hombre como me hacía suyo a la vez que imaginaba que en un rato sería follado por el señor. 

Ambos hombres sacaron sus pollas dejando mi agujero con un gran vacío y rápidamente quitándose el condón cambiaron a otros me puso al borde de la cama levantando mis piernas contra su pecho y en el momento que ...

... sentí como su capullo se frotaba por mi esfínter mi ano se abrió para recibir aquel pollón. 

Prácticamente entró de la nada sí que sentí el mayor tamaño tanto en largura como en grosor pero mi culo dolorido la dejó entrar entera ahora era el señor el que recibía la polla de aquel invitado  los tres teníamos la respiración agitada y jadeábamos como caballos al trote. 

Me cambió de postura y me colocó otra vez al borde de la cama pero esta vez boca abajo y abriendo mis nalgas volvió a introducirla de un solo golpe cosa que ya debía estar haciéndose natural para él pero que para mí suponía dolor mezclado con aquel extraño placer a ser follado por el culo. 

Fue señor el que abandonó mi culo sintiendo aquel gran vacío que sentándome en la cama comenzó a regar mi cara junto a la del invitado hasta introducirmela en la boca creo que yo mismo para sentir el sabor de aquella leche, el mismo junto a su amigo recogía la leche de mi cara para besarnos unos con otros y hacer lo mismo con el otro así y limpiamos nuestras caras unos a otros llegó el turno del invitado este echó una buena carga de leche sobre mi cara y algo era del señor pero introduciendola rápidamente en mi boca sentí aquel sabor de leche distinto más dulzón que tragué sin compartirla el señor limpio mi cara y pidió su cacho de polla que ya prácticamente creo que había exprimido uniéndose el invitado como habíamos hecho antes a recoger los restos y darnos un buen morreo los tres. 

Yo no había preguntado por la ...