Mi jefe me convirtió en su amante. 2 - Relatos Eróticos

Mi jefe me convirtió en su amante. 2

... volvió a acariciar y besar, respondiéndole que si quería, pero que me diera tiempo para decirles. Así que me dijo “bueno está bien, pero te llevo cómo estás a un hotel allí te vistes y te vas a tu casa y mañana llegas antes que todos para vestirte en la bodega y maquillarte, que te ayude Ruth” (la chica que me había ayudado), “así que vámonos”.

          Ya en mi casa, platiqué un ratito con mi mamá mientras merendaba y me fui a dormir. A la mañana siguiente me paré muy temprano y mi padrastro me abordo diciéndome “como te ha ido Fernandita”, a lo que respondí “soy Fernando y lo sabes y me agarró fuerte del brazo diciéndome “sabes que eres hembra, solo es cuestión de tiempo para que lo demuestres y te voy a coger, serás mía cuando yo quiera” a lo que le dije “ni lo sueñes” y él se rio y me dijo “tú solita me pedirás que te coja y me darás tus nalgas voluntariamente, incluso podría decir que estarás vestida de mujer y me pedirás que sea tu macho. Esas nalgas van a ser mías”, luego me dio una nalgada y se fue riendo.

          Me fui a mi trabajo y le pedí a Ruth que me ayudara a maquillarme, y ella me maquillo y me dio la ropa que me tenía que poner, un vestido corto de likra en color beige, que me quedaba arriba de media pierna, tacones altos color beige, medias transparentes, brasier con relleno, peluca y la joyería. Cuando estuve lista subí a la oficina de mi jefe y como él no había llegado, mientras lo esperaba ordene su escritorio, me prepare un café y luego me ...

... fui a mi oficina, y mientras me tomaba mi cafecito me quede pensando en que en realidad en los últimos 2 días varios hombres incluyendo a mi padrastro habían manifestado su deseo de hacerme su hembra para tener y disfrutar mis nalgas, cosa que me incomodaba pero al mismo tiempo me alagaba porque me sentía feliz usando ropa femenina y me había gustado mucho sentir las caricias de mi jefe en mis piernas y labios. 

          Así, estando inmersa en mis pensamientos estuve un ratito, hasta que una llamada telefónica interrumpió mis pensamientos, era mi jefe, quien me dijo que por motivos de salud no se presentaría el resto de la semana, sino hasta el próximo lunes. También me dijo que el contador me buscaría para auxiliarlo, que ya había hablado con él y asimismo, que el jefe de departamento de la boutique tenía la indicación de buscarme para que me pusiera las prendas que le pidieran los clientes y las modelara. Y agregó “muñeca estos días practica maquillarte y caminar con tacones altos y el lunes te veo, llévate un vestido muy putisexy, vestido muy corto y entallado para que se te vean todas las piernas y se te noten las nalgas y tacones muy altos, porque ese día te voy a coger”, a lo que respondí afirmativamente y muy contenta. Cuando colgamos espere un poquito y grande fue mi sorpresa al ver al contador, que era uno de los ejecutivos que habían ido a ver a mi jefe el día anterior.

          Tanto ese día como los 2 días posteriores pasaron sin novedad, pues apoye al ...