Iniciando mi vida sexual (Y Voyeur) gracias al maduro - Relatos Eróticos

Iniciando mi vida sexual (Y Voyeur) gracias al maduro

Una chica de 18 con un hombre maduro de 54 años...
Holaaa, soy Eliza, está es la continuación de mi relato anterior (Se encuentra en la sección de Primera Vez). Si les sigue gustando mis anécdotas, pronto traeré más. También me disculpo si me tarde , por mi trabajo he andado ocupada, pero bueno sin más comenzamos.

Después de esa ocasión donde Ricardo me desvirgo en el motel, aún estaba procesando el como había pasado todo, tenía muchos sentimientos encontrados, nunca me había sentido tan deseada, y no sabía si estaba cometiendo un error. Al dia siguiente en la universidad decidí acompañar a Marlene a desayunar, no separamos un ratito del grupo para hablar a solas , le conté todo lo que había pasado en el motel, y que el me había dejado comprar lo que quisiera, ella me cuestiono si me encontraba bien, que como me sentía, que si el se había venido dentro, bastantes cosas que pues cualquier amiga te preguntaría cuando se preocupa por ti, y luego me confesó que nunca pensó que yo me arriesgaría o me atrevería a algo así, al final del día siempre me veía muy tímida y callada, yo simplemente me reí con ella, y le confesé que me había gustado mi primera vez.

Pasaron algunas semanas y Ricardo y yo seguimos hablando y saliendo de vez en cuando, algo que me encantaba de el, es que a pesar de que le platicaba cosas ñoñas, el trataba de aprender de ello e investigarlo, por ejemplo, le comenté que mi anime favorito era Death Note, y en la siguiente salida el me empezó a ...

... platicar que le habían parecido los episodios que se aventó para empezar la serie, esa conexión pese a la edad no la sentía con alguien más. Salíamos a comer , a cenar, a veces a librerías, a veces a arcades, siempre elegía lugares discretos porque el sabía que yo era tímida, y respetaba eso, a veces solo paseabamos en su auto por la ciudad, pero bueno , dejando de lado lo cursi, también a veces nos poníamos algo cachondos cuando estabamos en su auto, parábamos en calles poco transitadas, o en parques y nos comenzábamos a besar, a tocarnos, a veces el me masturbaba en su coche, sus dedos ásperos se sentían como el cielo cuando tocaba mi clítoris, también yo lo masturbaba a el, a veces solo lo acariciaba por el pantalón, y en ocasiones le desabrochaba el zipper para sacarle la verga y empezar a masturbarlo. Había pasado casi 2 meses desde que comenzamos a salir y un mes desde la última vez que hablamos tenido sexo, una vez, mientras volvíamos de una librería (Y dónde me compro varios libros que quería por cierto), me deja en la plaza de siempre, pero antes de despedirse, lo noto serio , o bueno, más bien pensativo, le pregunto que si estaba bien, y me mira con su sonrisa tan calida , me dice que estaba bien, pero que no sabía cómo invitarme a su casa, yo estaba muy nerviosa, pero le dije que aceptaba si el quería (Instinto de supervivencia 0, lo sé), entonces me dijo que mejor lo planearamos por mensaje. De regreso a casa , me acosté y pensé que talvez me precipite un poco con mi ...