Solo nos tomó 4 años… - Relatos Eróticos

Solo nos tomó 4 años…

Hola! aquí Paula, tal vez me recuerden del relato de mi primera vez en cabinas, se quedó en continuación y pronto daré actualización, pero por el momento les vengo a contar otra experiencia de hace un par de años. 

Cuando me volví más activa en tw (ahora X), me hice amiga de un chavo de Toluca, al cual le pondremos Santi. 
Santi y yo empezamos una amistad/coqueteo algo inocente, el cual con el tiempo se volvió algo más sexual. 
Comenzamos a intercambiar fotos y videos masturbandonos o simplemente desnudos, todos los días sin falta, uno más explícito qué otro y cada vez necesitábamos más, pero por algunas situaciones no pudimos vernos durante todo ese tiempo, hasta este año (cabe mencionar que estuvimos así durante 4 años).
A inicios de año se vino a vivir a la ciudad y aunque yo tengo novio, eso no le impido para comenzar a hablarme de nuevo y proponer qué nos quitaramos las ganas de una vez por todas. 
Así que empezamos a armar un plan para poder vernos, no sin antes estarnos calentando. 
Toda la semana pre a vernos, me escriba pidiéndome cosas, que le enseñará mis tetas, que me metiera los dedos, que le enviara audios gimiendo su nombre y más. 
Como buena perra obediente, hice todo lo que me pedía y un poco más, obvio conocía ya sus gustos y no pude evitar complacerlo en cada sugerencia. 
Lo único que deseaba en ese momento era por fin sentir su verga abrirse paso dentro de mi y que me llenará de semen, como muchas veces me lo había dicho. 

Así que el tan ...

... esperado día llego, llevaba 15 días sin coger para poder guardar todas mis ganas para él. 
Ese día iba vestida muy casual, nada llamativo ni provocativo, solo iba depilada y con una tanguita color rosa junto con un bra a juego. Lo estaba esperando justo afuera del metro donde quedamos que pasaría por mi y no podía evitar sentir emoción y un gran cosquilleo en mi entrepierna, podía incluso sentir que mi tanga estaba húmeda y de la misma calentura qué tenia, apretaba mis muslos, buscando un poco de fricción y calmar el calor de mi vagina. 
Paso por mi en su auto y así como me subí, fui recibida por un beso algo apurado, pero también lento y muy detallado. 
Pasaba su lengua por mis labios antes de introducirla en mi boca, su mano sujetaba mi nuca y me empujaba a él. 
Nos separamos y nos apresuramos a nuestro destino. Durante ese rato, nadie mencionaba ni una palabra, estábamos demasiados tensos y desesperados, queríamos esto desde hace mucho y por fin lo estábamos obteniendo. 
El quería abusar de mi y yo quería que hiciera lo que quisiera con mi cuerpo. 
Llegamos a la habitación del hotel y así como cerro la puerta tras de él, no perdí ni un segundo en pegarme contra la puerta y desabotonar mis jeans, los bajo de un tirón e hizo qué me los sacara rápido, fueron solo segundo cuando sentí como se hincada y subía mi pierna a su hombro, comenzó besando mi muslo y luego sin perder tiempo, beso por encima de mi tanga húmeda mi vagina. 
Suspire profundamente y en ese momento ...