Nunca quise ser artista pero a veces no hay opción
Fecha: 05/01/2019,
Categorías:
Gays
Autor: Lujan, Fuente: CuentoRelatos
... sensación de culo abierto a más no poder es dolorosa, pero para cuando habría podido empezar a disfrutarla, Sara… - Como comprobarán, si continuamos empujando pueden ver que el agujero en cuestión es capaz de acomodar instrumentos de tanto calibre como longitud variable
Me lo saca con la misma velocidad que lo metió, haciéndome temblar las piernas y poniendo muy en evidencia que el trabajo que Antonio ha hecho con las cuerdas es muy eficiente pues apenas me puedo mover un milímetro.
—Vamos a cubrirle los ojos para que no vea a quién le está dando servicio – dice al ponerme un antifaz que me deja completamente ciego – y adelante. Pónganse en tres filas, los precios están acordados, páguenme a mí directamente, tiempo máximo son 5 minutos por cliente
Oigo pasos de la gente moviéndose de un lado a otro, tintineo de monedas y a alguien acercarse a mi cabeza. Me agarra del pelo y me ponen una polla, con condón, en la boca. Lo único que tengo que hacer es abrirla para que el tipo, sea quien fuere, comience a follarme hasta la garganta. Obviamente, la visión de Sara, completamente desnuda como estaba, jugando a placer conmigo era más para poner a la clientela a tono que otra cosa.
—Venga Luis, pollo asado – dice la polla delantera
—Voy, voy, espérame
Parece que me viene la primera polla en el culo. Noto como posan una mano en la espalda, con la otra me abren el culo y oigo a mi mujer
—Un segundo, vamos a poner un poquito de lubricante aquí
Un chorrito frío se ...
... desliza por mi ano y antes de acostumbrarme a la temperatura ya hay una polla empujándome primero, y penetrándome después, ya a velocidad considerable. Está claro que esta gente quiere sacar el máximo provecho de sus cinco minutos.
Se oyen vítores de aprobación mientras el tal Luis me folla cada vez más fuerte y más profundo, siento cómo mi culo choca una y otra vez contra su vientre y cómo sus huevos tocan los míos. Mi ano ya no duele nada y todo es disfrute. Dentro, fuera, dentro, más dentro, más rápido. Si alguien me tocara la polla ahora estallaría de inmediato, pero al parecer no la quiere nadie.
—Dale Juán, que yo me corro ya – oigo desde atrás
Parece que le han clavado unas espuelas. El Juán me pone las dos manos tras la cabeza y me empieza a clavar la polla en la boca a exactamente el mismo ritmo que la que tengo en el culo, mientras que por detrás me han agarrado de los hombros y me están follando como si quisieran hacer un agujero. ¿No se ha enterado de que ya hay uno?
—Tiempo – dice Sara
—Un… se…gundo – dicen al unísono por delante y por detrás mientras ambas pollas se me meten hasta el fondo, se quedan unos segundos ahí entre jadeos y gruñidos y salen
No hay mucho tiempo de descanso. Casi inmediatamente tengo otra polla en el culo, que parece que es popular. Esta es algo más grande, aunque no tanto como la que se ha puesto mi Sara. En esta ocasión, el tipo que me está follado es más suave, de momento, y en lugar de agarrarme se ha recostado sobre ...