1. Más allá de una fantasía con mi madre (Cap. 9)


    Fecha: 09/01/2019, Categorías: Grandes Relatos, Autor: andrewotero, Fuente: CuentoRelatos

    ... un hombre que estaba completamente enamorado de ella. Pues el beso y el “te quiero tanto” de anoche me daban fuerzas para hacerlo.
    
    Por otro lado la canción que escuchaba y su forma de cantar, me daban alas para no equivocarme en el paso que pretendía dar. Decirle que estaría dispuesto a luchar por ella, y que aunque me demore años, la conquistaría si me diera la más mínima esperanza para hacerlo.
    
    —La reunión es a las 12, y no sé a que hora nos desocupemos, pero por lo bajo estaremos terminando pasadas las 4 de la tarde, no te preocupes por mí, ya arreglaron en llevarnos de comer a todos quienes iremos a trabajar, así que te tocará almorzar solo por hoy, me decía, mientras cerraba su portátil y guardaba sus cosas.
    
    —Está bien, le dije, yo solo quería…. Y no me decidí a decirle que quería conversar con ella…
    
    Me interrumpió lo que quería decirle, cuando exclamó:
    
    —Son más de las 11!!, me atraso a llegar, y esperan esta información, es de vital urgencia.
    
    Cogió sus cosas, una chaqueta que estaba en el sillón, buscó sus llaves y se dispuso a salir. Y yo parado como una estatua, viéndola hacer todo.
    
    —Portate bien, me dijo, mientras con su mano acariciaba mi rostro, se paraba un poco de puntillas para alcanzarme, ya que aunque con tacos, yo era más alto que ella, y me estampaba una beso en la mejilla, el cual ahora no se preocupó en limpiar, sino por lo contrario me daba la impresión que quería dejar una huella que sea difícil de sacar.
    
    El despecho que me ...
    ... había invadido minutos antes, se había desvanecido, y ahora me invadía una serie de dudas y emociones que serían difíciles de explicar por el momento.
    
    No pude salir de mi pose de estatua, mientras giraba sobre mis pies para verla salir por la puerta de la casa, toda ella apresurada, moviendo sus caderas provocativamente y esa falda, nuevamente complice de mis fantasías, que gracias a su partido, me permitía ver parte de su muslo en su rápido caminar.
    
    Ella salió y cerró la puerta, no sé cuanto tiempo me quedé como un bobo mirando la puerta, hasta que volví en mí, todavía no podía asimilar lo que estaba pasando.
    
    Entre desayunar, arreglarme, comprar algo de comer y hacer mis tareas, fue en lo que me ocupé mientras estaba solo en la casa. Me parecía que el tiempo no pasaba, pues casi había terminado todas mis obligaciones y no eran siquiera las 3 de la tarde, y Sofía me había dicho que saldría pasadas las 4, que feo que es esperar que pase el tiempo.
    
    Me dispuse a arreglar algunas cosas en la casa, y el tiempo no pasaba, entonces me puse a pensar en la forma como quería enfrentar a Sofía y llevarla a una conversación sin ánimos de parecer un desesperado, mucho menos un maníaco sexual.
    
    Así que como todavía tenía tiempo, decidí preparar el terreno para una “cita” sorpresa en la casa, a lo que llegara Sofía de su trabajo.
    
    Compre rosas y la acomodé en un bonito jarrón en la sala, limpie todo lo que estaba a la vista y no debía estar ahí. Busqué una selección de música ...