De compañero de carrera a amante (Parte 2)
Fecha: 11/08/2017,
Categorías:
Transexuales
Autor: ynotmorela, Fuente: CuentoRelatos
... menos me dio la oportunidad de volver hacerlo y tener un poco más de tiempo para hacerlo.
La puse en cuatro, una vez más con sus nalgas hacía arriba, a las cuales nalgueé (no aguanté más la tentación de hacerlo), a Paola le agradó.
Con ambas manos en sus nalgas flexioné mis rodillas y ubiqué mi verga en la entrada de su vagina, y la metí.
Al principio con movimientos suaves para no perder el equilibrio, después la tomé de su cabello y una vez que la tenía bien agarrada comencé a embestirla más rápido y más fuerte; arqueando su espalda me tuve que mover un poco para no soltarle el cabello, quedé más apretado a ella, eso le gustó, con la cara una vez más cubierta por la almohada me gritó que le diera más fuerte, así o hice.
No me toqué el corazón, mientras le daba fuerte, solté una de mis manos y empecé a tocarle el culito otra vez, eso la hizo estremecerse y jadeo profundamente. Seguí picando su culito hasta que perdió la fuerza en sus piernas, le temblaron, tuvo un hermoso orgasmo y lo digo porque su forma de gemir y de gozarlo no había sido como los anteriores que le había visto.
Paola, mientras recuperaba la respiración, terminó boca abajo, veía como respiraba rápidamente pero yo ya no podía aguantar, ya quería explotar en ella.
Me coloqué sobre ella y con mis pies separé los suyos, me dejó la entrada, hice su tanga a un lado y entre en ella, lo hice rápido y fuerte, la empujaba hacia el colchón con tanta fuerza que seguro incomodamos a los huéspedes de ...
... la habitación inferior.
Mis manos tomaron las ella, correspondió a la acción. Me dejé caer sobre ella sintiendo sus maravillosas nalgas en mi ingle, guio mis manos hacia sus pechos y me hizo exprimirlos, pegó un pequeño grito ahogado por la almohada, en ese instante comencé yo.
Mi verga comenzó a calentarse, sentí un cosquilleo que la recorrió desde la punta y poco a poco siguió, en ese momento puse mi cabeza junto a la suya y la otra almohada la coloqué encima de nosotros, jadeaba cada vez más fuerte en su oído, ella comenzó a jadear igual.
P: Vente adentro, la quiero adentro
Yo: Ni pensaba salirme
P: Quiero sentir tu leche caliente dentro de mí, quiero esa explosión
Mientras mi brazo aplastaba la almohada contra nosotros, con la otra le pellizcaba uno de sus pezones, sus jadeos cada vez eran más intensos, los míos igual y de la misma forma que en su casa, salió el primer chorro y grité junto a ella.
P: Ay, pero que rico se siente, dame otro
Yo: Ahí va
P: Ay papito, me harás un hoyo por dentro, dame otro
Yo: (entre gemidos) Ahí está
Yo me quedé dentro de ella y siguió moviéndose hasta alcanzar otro orgasmo, nos quedamos acostados besándonos y seguimos tocándonos, hicimos un delicioso 69 que hasta la fecha sigue siendo fuente de inspiración; ella se sentó en mi cara y comenzó a mamarme. Fue bastante excitante sentir como sus jugos caían en mi cara, los chupaba, eso me ocasionaba fugas a las que Paola le sacaba bastante provecho, fue tan hermoso ...