1. Campo Nudista


    Fecha: 23/01/2019, Categorías: Zoofilia Autor: Key-Q, Fuente: SexoSinTabues

    ... piernas sobre las suyas, froté mis labios vaginales contra su pene y le respondí "¡Si, tienes razón! ¿Y qué vamos a hacer entonces?", a lo que me respondió "Mira a el pobre perro" apuntando a su pene que algo se asomaba desde su funda "Su semen no podría fecundarte y ambos saldrían beneficiados" "¡Definitivamente eres un depravado de primer corte!" le respondí y me di vuelta quedándome sentada mirando hacia la laguna y él se acercó por atrás sentándoseme con sus piernas abiertas pegadito a mi espalda haciéndome sentir su pene aún erecto entre mi coxis y la comisura superior de mis glúteos al momento que me abrazaba, comenzando a chuparme el cuello y masajear mis senos, para luego con una mano sobar suavecito mis pezones y con la otra bajar a mi sexo e introducirme dos de sus dedos haciéndome un spider-man, me tenía tan excitada que solo quería que me la metieran. Por lo que me eché para adelante poniéndome en cuatro para ver si se animaba a penetrarme, y para mi sorpresa así lo hizo dejándome sentir lo rico que su duro y caliente pene iba entrando, me bombeó por unos 30 segundos y luego se salió "¡Noooo, es que voy a acabaaaarrr!!!!" y frotándose entre mis nalgas largó su semen en mi baja espalda. El belga estaba expectante a un costado nuestro y mi primo insistió "¿Puede él terminar de sacarte las ganas?". Y yo que realmente me había quedado con todas las ganas, respirando profundo de respondí "¡Ya, dale!". "¡Ya, venga, venga!" le dijo al momento que se corría para un ...
    ... costado, lo posicionó sobre mí y como vio que no atinaba le ayudó empujándolo un poco de atrás y orientando su cosa a mi entrada. Fue algo brutal, digno del animal que me estaba poseyendo, apenas sentí lo caliente de su pene ya me lo tenía encajado hasta lo profundo de mis entrañas, picoteando algo muy duro y puntiagudo en mi cuello del útero mientras algo más grueso se batía en la caverna misma de mi vulva produciendo un ruidoso SHLAFT, SHAFT, SHLAFT, SHAFT, SHLAFT, SHAFT, pero esa punta entró en mi matriz y acto seguido el perro me apretó aún con más fuerza hundiéndomelo como si en eso se le fuera la vida y percibí que esa parte más gruesa se su aparato ya era una bola que me tenía toda repleta, y latía al ritmo que iba inyectando su semen en mi interior. Todo esto tan intenso fue solo en un minuto y medio o dos, para luego el animal estarse bajando para un costado y hacerme saber que estábamos pegados, pues sentí como esa gran masa se giró en mi interior sin aflojar ni un solo centímetro para afuera. Sabía que los peros quedan abotonados a sus hembras cuando se aparean, pero jamás pensé que con una mujer también, bueno jamás había pensado en tener sexo con un perro ni tampoco sabía si se pudiera o hubieran mujeres que lo hicieran. Pero pese a lo raro, se sentía muy bien esa tremenda masa de carne caliente y dura ahí adentro, además su abundante eyaculación no cesaba y estaba muy rica. Mi primo ayudo al perro a terminar de darse vuelta y luego se me puso arrodillado por delante, ...