1. La comida de la oficina.


    Fecha: 29/01/2019, Categorías: Sexo en Grupo Autor: falcon, Fuente: RelatosEróticos

    ... los ojos y le suplicaba; ¡quítate otro trapito!
    
    Me quito otro trapito si mi maridito me da permiso, pero antes ayúdenme a quitarme las pinches esferitas que me están picando los ganchitos.
    
    Toño feliz le quitaba todas las esferas, y me insistía ¿verdad que se quite otro trapito?
    
    Pues solo que me prometas no contarle a nadie lo que pase esta noche, que todo quede entre los tres.
    
    Te lo juro por esta, hacia una cruz con sus dedos y la besaba, te juro que no abro la boca de veras, te lo juro por mis hijos.
    
    Entonces por que no le quitas tu el otro trapito le confié, mi esposa me miraba con una excitación tremenda…… ¿te parece bien mi amor?
    
    Ella asentía con la cabeza, entonces mi amigo se fue a sus espaldas y le desabrochaba el sujetador, aprovechando para restregar su verga en las nalguitas respingonas de mi esposa, cuando se lo sacó la giro hacia él y le decía están bellísimas tu montañas, las acariciaba delicadamente y le preguntó a mi mujer ¿puedo?... Y se las empezó a besar y a mamar con ternura, mi esposa le acariciaba la nuca apretándolo más contra sus pechos mientras gemía, yo le acariciaba las nalgas y metía mis dedos entre la red de sus pantaletas estaba empapada su entrepierna, y yo tenia mi verga que reventaba.
    
    Mi amigo subió besando su cuello y le plantó un besote de lengüita, que mi esposa disfrutaba intensamente sus lenguas se trenzaban, por momentos me daban celos pero era tan esperado este momento que mejor los convertía en un morboso ...
    ... disfrute, es muy raro lo que me pasaba pues tenía muchos celos pero estaba a punto de venirme. Toño le acariciaba suavemente las nalgas. Luego se separaron y mi mujer nos pregunto jadeando:
    
    ¡¿No quieren ver el paisaje completo?!.... Yo creo que ya las vieron bien ¿verdad?
    
    ¡Están muy ricas!!! Gritaba Toño emocionado, la giraba acariciándolas suavemente, mientras me preguntaba… ¿puedo? Metiendo sus manos por los lados de la pantaletita, le respondí sí con mucho aplomo, entonces se hincó por el frente y se las bajó quedando su panochita en sus narices sin decir más mi amigo le abrió las piernas y le empezó a dar una mamada de pronóstico.
    
    A mi esposa le temblaban las piernas no la sostenían del orgasmo tan fuerte que tenía, yo la sostenía por atrás acariciando sus pechos y besando su cuello y orejas mientras Gaby gemía a gritos, un momento después mi amigo se ponía de pie gritando que rico sabor tienes estás deliciosa. La hacia girar escudriñando cada centímetro de su cuerpo desnudo, mi esposa aprovechaba los giros para rozar sus nalgas en la verga de Toño que reventaba su pantalón.
    
    Mi amigo y yo nos arrancábamos la ropa, él muy prudente se quedó en boxers mientras yo estaba totalmente encuerado con mi verga como nunca de grande tiesa; Gaby nos miraba con los ojos de plato mientras le daba un trago a su copa, ahora la que me pregunto ¿puedo? fue mi mujer claro que sí hoy puedes hacer todo lo que te plazca.
    
    Entonces se acercó lentamente a Toño y le acariciaba la verga por ...
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