1. Be_my_daddy


    Fecha: 31/01/2019, Categorías: Hetero Autor: Elegos, Fuente: CuentoRelatos

    ... entre champagne y putas. Una vez mis clientes estuvieron satisfechos cogí mis documentos y me retiré al Hotel de cinco estrellas. Estaba reventado. Estando en el taxi de camino al hotel llegó el mail de mi díscolo bebé. — ¿Dónde estás?—Eran las dos de la mañana. Miyet lag hacía que diera cabezazos; pero escribí: —En el Faena, suite 5187— En su siguiente mail me dijo de todo: cerdo capitalista, vendido, puto esclavista, explotador… Le contesté que dejaría recado en recepción de que mi sobrino Andrés venía a verme, y también una llave. Seguramente estaré dormido cuando llegues, no puedo más. Pide lo que quieras del servicio de habitaciones. Hay Spa. Disfruta de la estancia bebé.
    
    Desperté sobre las 3 de la tarde. A mi lado estaba durmiendo un joven de unos 20 años. Con una larga melena rubia. Estaba de espaldas, sus femeninas curvas y su poco vello despertaron mi deseo de inmediato. Estaba totalmente desnudo. Mi habitación parecía una leonera. Me pareció natural que estuviese allí a mi lado, a pesar de que mi suite tenía dos habitaciones con sendas camas. Fui al aseo. Al volver estaba despierto. Se había dado la vuelta. Su cara guardaba relación con su cuerpo, barbilampiño, aniñado ojos claros y rasgos un tanto orientales. Se estaba tocando la polla. Aquello era algo más que morcillona y apuntaba a que era grande.
    
    — ¿Te parece bonito cómo has dejado la habitación? Esto es una pocilga, de hecho me extraña que no huela como tal.
    
    No dijo nada se puso a cuatro patas sobre ...
    ... la cama y me ofreció su blanco culo. No me lo pensé dos veces, le di en uno de sus cachetes con todas las fuerzas que tenía. Mis dedos quedaron marcados en sus blancas carnes. De la fuerza que le di hasta lo tumbé en la cama. Me miró con los ojos vidriosos. Me pidió perdón y volvió a ofrecerme el culo.
    
    —Lo sé Daddy, soy malo, pégame más—
    
    No puedo describir lo dura que se me puso. Le volví a dar, no tan fuerte esta vez. Y así hasta que el cachete se le puso rojo. Como quería darle en el otro cachete con la diestra, pues con la zurda no se me da bien, hice que se diera la vuela. Cuando se dio la vuelta me puse de píe a la altura de su cabeza, pensando cual era la mejor manera de atacar su otro cachete. De repente note como se introducía mi polla en su boca. Era un calor delicioso. Empezó a succionar y a masajearme los huevos, también me pajeaba.
    
    Le deje hacer durante un rato. Era la mejor mamada de toda mi vida y eso que había probado putas en los cinco continentes. Lo cogí de los pelos y le levanté la cabeza bruscamente. Le puse la cabeza a mi altura y le dije que si pensaba apaciguarme así la llevaba clara, pero que de momento estaba bien. Me tumbé en la cama y le dije que me la podía chupar hasta correrme. Y que luego hablaríamos de los insultos del mail. Me la estuvo mamando durante 15’ más o menos, me hacía ver el cielo. Tenía una técnica increíble. Me chupaba los huevos, me pajeaba apretando en el tronco y aflojaba en el glande, y lo hacía muy rápido. Su lengua ...